No todos los pasajeros que tenían previsto volar en el avión que transportaba a los futbolistas del Chapecoense brasileño rumbo a Colombia lo hicieron. 75 personas murieron después de que se estrellara cerca de Medellín, en el noroeste de Colombia, pero tres de ellos no llegaron a subirse al avión por casualidad y uno de ellos fue el hijo del entrenador.
Las autoridades han hecho pública la lista de los pasajeros que no llegaron a montarse al avión por unos motivos u otros. Uno de ellos es Matheus Saroli, de 25 años e hijo del entrenador Caio Junior, que está entre la lista de los fallecidos.
"Amigos, yo, mi hermano y mi mamá están bien. Necesitamos fuerza y privacidad, especialmente mi madre. Pero gracias a todos por todos los mensajes. Yo estaba en Sao Paulo y no subí a bordo porque me había olvidado mi pasaporte. Somos fuertes y pasaremos por esto. Gracias por todos sus mensajes", ha escrito en su cuenta de Facebook.
El alcalde y el presidente de la Asamblea tampoco subieron al avión
Luciano Buligon, alcalde de Chapecó, llegó a viajar a Sao Paulo para subir al avión, pero dio marcha atrás justo antes de embarcar para hacer un curso y decidió retrasar su viaje un día.
Gelson Merisio, presidente de la Asamblea del estado de Santa Catarina, donde se encuentra la ciudad, no se montó en el avión a última hora por compromisos políticos.
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