El piloto francés Jules Bianchi, fallecido la pasada semana tras nueve meses en coma por un accidente durante el Gran Premio de Japón en octubre de 2014, ha sido homenajeado este domingo con un minuto de silencio antes de la carrera en el Gran Premio de Hungría, décima prueba del Mundial.
El circuito de Hungaroring apareció repleto de mensajes en las gradas en memoria del expiloto de la escudería Marussia, así como muestras de cariño de todos los pilotos de la parrilla luciendo pegatinas en los cascos y monoplazas durante todo el fin de semana de competición.
Al emotivo acto celebrado en el paddock acudieron sus padres, Philippe y Christine, además de su hermano Tom, que presenciaron en directo acompañados del director de Marussia, John Booth, el emotivo homenaje que el mundo de la Fórmula 1 brindó a su hijo.
Los 18 pilotos de la parrilla, que unieron sus cascos con el del francés, formaron un círculo durante el minuto de silencio junto a los tres familiares del deportista nizardo.
Como muestra de respeto por el fallecimiento, la Federación Internacional del Automóvil (FIA) anunció recientemente que han retirado el dorsal 17 de la parrilla.
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