La impresionante temporada de los Golden State, Curry y compañía

La impresionante temporada de los Golden State Warriors y su MVP Stepehn Curry está a punto de entrar en los libros de los récords de la NBA.

La seberbia actuación del conjunto californiano durante la campaña será confirmada una vez más este miércoles cuando enfrente como anfitrión a los Memphis Grizzlies, posible víctima de lo que sería una nueva marca de victorias en la temporada regular.

Ya la victoria conseguida el domingo en casa de los San Antonio Spurs le permite a los Warriors desafiar a los Chicago Bulls de Michael Jordan, con el título no oficial del mejor equipo de la historia en una temporada regular.

La semana de Golden State, que había comenzado con una derrota inquietante y sorprendente en casa contra Minnesota (124-117), terminó con fiesta el domingo con un rotundo triunfo sobre un rival directo por el título en el Oeste.

Con esa victoria, la número 72 en 81 partidos desde el inicio de la temporada 2015-2016, el campeón vigente de la NBA, liderado por Curry (37 pts), empató el récord de victorias establecido en 1995-1996 por los Bulls de Jordan (72-10).

Los Warriors pueden mejorar ese registro mediante una victoria, que sería la 73, en casa el miércoles en su partido número 82 -y último- de la temporada regular.

La franquicia de Oakland también impuso el récord de victorias a domicilio en una temporada regular con su éxito número 34 en la carretera, uno más que los Bulls de Chicago de hace veinte años.

Curry, quien era apenas un niño de 8 años cuando el récord de los Bulls y Jordan, está a las puertas de convertirse también en leyenda.

Los 'Guerreros', siempre inspirados por Curry y Klay Thompson, le infligieron la primera derrota en casa el domingo a los Spurs, que se mantuvieron invictos como locales en 48 juegos, 39 de ellos esta temporada.

"Esa fue una victoria importante para nuestra confianza. Si tuviera que hacer frente a finales de mayo a los Spurs (en la final de la Conferencia), recordaré ese partido", había dicho Curry.

Curry recuerda con aire de nostalgia los tiempos en que acompañaba a su padre, exjugador en la NBA, a la arena cuando enfrentaba a los legendarios Bulls de Jordan.

Pero reconoció que soñaba con alcanzar algún día los logros que Jordan y los Bulls conquistaban en su dominio sobre la NBA.

"Para ganar la mayor cantidad de partidos en una temporada cuando uno es el campeón defensor es increíble: en cada juego, nuestros oponentes quieren que caigamos, pero somos un grupo de jugadores muy unidos, dispuestos a sacrificarnos por los demás", señaló Curry.

"A pesar de que el tiempo es difícil, esa victoria demuestra que todavía tenemos hambre", recordó el MVP.

No obstante, Curry considera que el récord es deseado pero no debe ser una distracción, ya que más importante es repetir el campeonato.

"Obviamente, estamos en el momento, disfrutando del paseo. Pero el objetivo es ganar el campeonato. Ese es el objetivo. Aunque estamos en una gran posición para terminar la temporada con una victoria y hacer algo que ningún equipo ha hecho en la historia. Claro que es un logro increíble", enfatizó Curry.

"Esta es una de las victorias más importantes de la temporada, pero no quiero decir nada cuando los playoffs comiencen", advirtió a su entrenador, Steve Kerr, compañero de Jordan con los Bulls durante la famosa temporada 1995-1996 que concluyó con un título.

Los Warriors saben que aún está muy lejos de conseguir seis campeonatos, pero al menos desde el domingo igualaron a los míticos Bulls y el miércoles podrían plasmar el nombre por encima de ellos en los libros de récords en el renglón de más victoria en una campaña.

Desde el principio de la temporada, los Warriors destrozaron el récord de mejor comienzo en la historia de la NBA (24-0) y llegaron hasta 26-1.

jr-meh/ma

Mostrar comentarios