"El reglamento nos amparaba para haber suspendido el partido y reclamar los 3 puntos. No ha pasado por nuestra imaginación esa opción. El Osasuna es un club señor y queremos ganar los puntos en el campo, no en los despachos", ha asegurado Patxi Izco, el presidente del Osasuna.
En una entrevista concedida esta noche al programa 'COMEsports Competició', de la emisora catalana 'COMRàdio', el presidente de Osasuna señaló que el Barcelona "pecó de confianza", como así aseguró que se lo dijo al presidente del Barça, Sandro Rosell.
"Se lo dije claramente a Rosell, que me parecía una temeridad viajar el mismo día a Pamplona, sin haber tenido para nada en cuenta ni siquiera los aspectos de la climatología, o el asunto de los controladores. Creo que debían haber viajado la víspera o, si no, por la mañana", ha añadido.
El viaje del Barcelona ayer a Pamplona resultó una odisea, como consecuencia de una seria de contradicciones que se generaron entre el Barça, AENA y la Federación Española, con el telón de fondo de la huelga de los controladores aéreos.
El Barcelona, según el propio club azulgrana, creyó que la Federación Española, como así confirmó por la noche su secretario general, Jorge Pérez, iba a suspender el partido por la imposibilidad del Barcelona de viajar en avión.
No obstante, ante la negativa de Osasuna de suspender el partido, la federación obligó al Barça a desplazarse a Pamplona.
El equipo azulgrana llegó a la capital navarra tras viajar en AVE hasta Zaragoza y en autocar después. Pero lo hizo tarde. De hecho, el partido comenzó con tres cuartos de hora de retraso, aunque ese directivo federativo ya dejó entrever que el colegiado había recibido indicaciones para esperar el tiempo que fuese al Barcelona, la misma postura que expresó por la tarde Osasuna.
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