El fútbol siempre te da una segunda oportunidad y el caso de Jonás Gutiérrez es un nuevo ejemplo. En octubre de 2013 le detectaron un cáncer en el testículo izquierdo y ahora ha salvado al Newcastle con un gol y una asistencia.
Jonás no volvió a jugar un partido oficial hasta este mes de marzo, cuando todo St. James Park le recibió en pie y con una atronadora ovación. Solo ha necesitado dos meses para convertirse de nuevo en el gran protagonista.
Primero asistió a Sissoko para que adelanta al Newcastle. Las hurracas necesitaban ganar para que su permanencia no dependiera de otros resultados.
Después marcó el segundo gol de la tarde en el minuto 84 para asegurar la victoria del Newcastle ante el Tottenham. Su celebración fue especialmente emotiva.
Una historia de superación
La vida de Jonás cambió en octubre de 2013, cuando el detectaron un tumor en el testículo. "No entendía nada", explicaba el futbolista cuando tiempo después explicó por qué estaba apartado del fútbol. "Cuando me confirman que tenía cáncer me fui a casa llorando". Prefirió tratarse en Argentina y pronto le extirparon el testículo e hicieron todo lo posible para que no apareciera metástasis.
Las cosas fueron bien, y el mes pasado ya estaba entrenando con el Vélez Sarsfield, su club de toda la vida en Argentina. "Luchar contra un cáncer hace que todos los problemas sean insignificantes. Es el partido más difícil que me ha tocado jugar",explica. Después de ser operado y recibir quimioterapia, Jonás superó la enfermedad y ahora vuelve a sentirse futbolista.
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