La afición del Real Madrid se vuelca con Casillas y pide la dimisión de Florentino

Después de volver a dar las gracias al Real Madrid, aficionados y prensa, Iker Casillas bajó al césped para posar con sus 19 títulos conquistados con el club blanco y recibir un baño de masas de unos seguidores que hicieron cola en las puertas del estadio para poder despedir a uno de sus ídolos.

"Ha habido discrepancia, y lo siento. Forma parte de la cualidad humana, y apartado queda porque me quedo con lo bueno, con las alegrías de la gente dentro de este campo", afirmó Casillas en su comparecencia de despedida, en el palco del Estadio Santiago Bernabéu junto al presidente, Florentino Pérez.Iker, un orgullo haber trabajado contigo tantos años. Mucha suerte en tu nuevo equipo! pic.twitter.com/Y2beNYQzjK— Cristiano Ronaldo (@Cristiano) julio 13, 2015

"Está claro que ésta es la definitiva, ya no hay más", bromeó el jugador al inicio de su discurso, en el que también apuntó que "habrá nuevos momentos para compartir con todos los madridistas", añadiendo que "curiosamente, es el primer día como jugador del FC Porto" en el que visita el feudo madridista. En ese sentido, reiteró su agradecimiento "a todo el madridismo y a todos los madridistas" que le han "arropado y apoyado mucho". "Como dije ayer, siempre que tenga la oportunidad vendré a animar al Real Madrid, y seré embajador allá donde vaya. Me ha tocado cerca, en Portugal, y seguiré llevando el nombre del madridismo donde esté", concluyó Casillas, en sus últimas palabras de despedida del Real Madrid.

Tras hablar ante los medios acompañado de Florentino Pérez, el capitán bajó al verde del Bernabéu para que más de un millar de madridistas pudieran decir adiós a un portero que, después de despedirse en el día de ayer después de leer un comunicado frío en soledad, recibió el cariño de una afición que ya le tiene como un mito. Más de 1.000 aficionados rindieron tributo al portero y alrededor de 100 pidieron la dimisión del presidente.

Bajo gritos de "Iker, Iker, Iker", "Florentino, dimisión" y "Ramos no se vende", los aficionados que llenaron el anillo inferior de la grada con acceso en la calle Padre Damián, demostraron su malestar con la salida de Iker Casillas, y los rumores sobre el traspaso de Sergio Ramos, así como por la gestión del presidente.