La elite del deporte en la Policía: pasión por dos profesiones

  • Saúl Craviotto, Álvaro Fernández Fiuza, Verónica Pérez, Leyre Eizaguirre, Pablo Carrera... son los deportistas de elite de la Policía más conocidos, pero también los compañeros de otros 200 agentes que, tutelados por la Agrupación Deportiva del cuerpo, se dedican con pasión a ambas actividades.

Sagrario Ortega y Nacho Barranco

Madrid, 18 ago.- Saúl Craviotto, Álvaro Fernández Fiuza, Verónica Pérez, Leyre Eizaguirre, Pablo Carrera... son los deportistas de elite de la Policía más conocidos, pero también los compañeros de otros 200 agentes que, tutelados por la Agrupación Deportiva del cuerpo, se dedican con pasión a ambas actividades.

"De no haber sido policía, no hubiera podido llegar hasta donde he llegado en el deporte", confiesa a Efe Craviotto, dos veces medallista olímpico en piragüismo, algunas más campeón del mundo y "muy agradecido" a la Policía por haberle permitido seguir compitiendo en una especialidad que nunca quiso abandonar.

Craviotto es el agente que más "brillo" ha dado al cuerpo policial -un oro y una plata-, junto con su compañero de embarcación Carlos Pérez Rial (un oro), pero otros diez policías han participado en la cita deportiva más importante, los Juegos Olímpicos, desde 1992.

Lo hizo en cinco ocasiones la agente Pilar Fernández, especialista en tiro olímpico, una disciplina en la que también han competido en distintas ediciones de ese evento Sonia Franquet, Pablo Carrera (diploma) e Isidro Lorenzo (diploma).

Además de Craviotto y Pérez Rial, el piragüismo ha dado satisfacciones a la Policía, como los dos diplomas olímpicos de Jovino González o el de Francisco Llera. Menos suerte tuvo Javier Hernánz, piragüista también y participante en Atenas 2004.

Unos Juegos en los que compitió, en la especialidad de remo, Jesús González, y en la de natación (saltos de trampolín) Leyre Eizaguirre.

Hasta aquí el "palmarés" olímpico, pero otra veintena de agentes han dado gloria a su "empresa" en mundiales, campeonatos europeos y de España con su participación en una docena de disciplinas, como, además de las ya citadas, atletismo, boxeo, judo, kárate, kickboxing, montañismo, kayac polo o vela.

Para que lleguen a lo más alto del podio, la Agrupación Deportiva de la Policía, que dirige el inspector jefe Jesús Rodríguez del Moral, tutela en la actualidad a algo más de 200 agentes deportistas federados de 29 disciplinas diferentes, pero la cifra de tutelados alcanza los 1.700 si se cuenta a todos los que han participado en campeonatos policiales.

Tal y como explica a Efe Rodríguez del Moral, aunque no todos los deportistas son de elite, la Agrupación, que ha sido ampliamente felicitada e incluso recibió de manos del Rey la "copa Stadium", facilita la práctica deportiva dentro del cuerpo, lo que permite a los agentes mantenerse en forma y redunda, por tanto, en el servicio policial.

Y para que los mejores puedan competir, la Policía les permite ejercer la profesión en el lugar donde exista un Centro de Alto Rendimiento (CAR) y el entrenador correspondiente.

Es el caso de Craviotto, destinado en la Comisaría Provincial de Lleida desde 2005 pero en comisión de servicio en la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de Gijón, lo que le permite entrenar en uno de los lugares predilectos de los piragüistas españoles.

Gracias a ello, el medallista olímpico puede entrenar entre tres y cuatro horas diarias y nunca ha encontrado trabas por parte de sus superiores para poder obtener permisos y competir, incluso fuera de España.

"Vi en la Policía la posibilidad de seguir con la piragua y de encontrar un medio de vida porque del deporte no se puede vivir", explica a Efe Craviotto, quien asegura que siempre le gustó el Cuerpo, que le ha dado "estabilidad, tranquilidad psicológica y económica".

Ocho meses sin cobrar como piragüista hacen que sea la Policía la que le permita vivir y continuar con su exitosa carrera deportiva.

No ha podido Leyre Eizaguirre acudir a los Campeonatos del Mundo de Natación disputados en Barcelona por una inoportuna lesión, pero esta agente cuenta con un amplia trayectoria internacional como saltadora de trampolín.

Más de veinte años son los que lleva esta canaria saltando y cuatro dentro de la Policía. Confiesa que opositar al Cuerpo fue "la mejor decisión" de su vida y que ahora, casi en el final de su carrera deportiva, quiere promocionarse para ascender en el escalafón policial.

Reciente ganador del Descenso Internacional del Sella, Álvaro Fernández Fiuza es otro de los deportistas más laureados dentro de la Policía, a la que entró no por vocación, ya que primero intentó ser bombero. Algunos amigos le convencieron y ahora está encantado porque dentro del propio Cuerpo puede encontrar "un montón de salidas".

Insiste el tres veces campeón del mundo de maratón en piragua que desde que está en la Policía han llegado sus éxitos, que ha conseguido hacer su sueño realidad y que ha contribuido a que el deporte sea "un buen escaparate" de la imagen policial.

Fernández Fiuza y la agente Verónica Pérez, campeona de España de carreras de montaña, comparten turno (el de noche) en la Jefatura de Policía de Oviedo, donde ambos pueden desarrollar su actividad deportiva.

Que Pérez pueda seguir compitiendo se debe a la oportunidad que le dio la División de Formación de la Policía cuando obtuvo el traslado de Madrid hasta la capital asturiana, donde dedica todo su tiempo a estas dos profesiones que, según manifiesta, le "apasionan".

Brillantes en el "terreno de juego", los cuatro deportistas, ejemplo de muchos otros, coinciden en que sin la Policía, no serían ahora lo que son.

Mostrar comentarios