La Vuelta se da una minivuelta por Galicia

  • Con las cinco etapas finales por disputar de la Vuelta 2014, la carrera española se va a dar una minivuelta por Galicia en la que según insisten sus protagonistas, aunque las diferencias entre los primeros indiquen lo contrario, "todavía puede pasar de todo".

José Luis Sorolla

A Coruña, 9 sep.- Con las cinco etapas finales por disputar de la Vuelta 2014, la carrera española se va a dar una minivuelta por Galicia en la que según insisten sus protagonistas, aunque las diferencias entre los primeros indiquen lo contrario, "todavía puede pasar de todo".

Los aficionados gallegos, como muchos otros en las diferentes comunidades autónomas españolas, dejaron hace catorce años de disfrutar de su Vuelta a Galicia y ahora será una de las tres grandes la que le ofrezca esa oportunidad.

En aquella carrera, que arrancó en 1933 con el triunfo de Salvador Cardona, ganaron ciclistas de un excelente nivel mayoritariamente españoles, como Miguel Indurain, el más destacado, junto a Abraham Olano y Marino Lejarreta o el estadounidense Andrew Hampsten, todos ellos triunfadores en alguna Vuelta, Giro o Tour.

En la Vuelta 2014, los que están peleando por la camiseta roja de líder son otros dos de los grandes de la actualidad, el español Alberto Contador (Tinkoff-Saxo) y el británico Chris Froome (Sky), con el también español Alejandro Valverde (Movistar) intercalado entre ambos, al menos de momento.

Froome y Contador esperaban haber dirimido sus diferencias deportivas en el pasado Tour de Francia, pero ambos se vieron afectados por el síndrome 2014 en las tres grandes vueltas en las que en todas ellas alguno o varios favoritos han sufrido duras caídas.

"Es mala suerte", sentenciaba en la jornada de descanso Purito Rodríguez (Katusha), aunque él en el Giro italiano fue uno de los afectados y a partir de ese momento la temporada se le ha ido cruzando y no ha terminado de alcanzar su mejor momento.

Contador llegó a la Vuelta diciendo que lo hacía muy justo y sin apenas preparación y "en la primera semana tuve que sufrir mucho" y tras verse con los primeros se "motivó, en Valdelinares ya tuve buenas sensaciones y a partir de ahí todo ha sido ir mejorando".

Una mejoría que le ha servido, a partir de la jornada siguiente y con el día de descanso por medio, para vestir consecutivamente siete veces "la Roja", además de ser el principal candidato al triunfo final y a sumar en su palmarés su tercera Vuelta.

Un poco más le ha costado a Froome que hasta la jornada de La Farrapona, también previa a la jornada de descanso, había dado más signos de debilidad que de fortaleza aunque se mantenía en la pelea por todo. En la cima del valle de Somiedo provocó su primer salto cualitativo en la clasificación general, únicamente superado por Contador y ya es tercero pero a solo tres segundos de Valverde.

Con Contador asentado al frente de la clasificación, la pelea por ver quien le acompañará en el podio de Santiago de Compostela con la catedral de fondo está centrada entre el murciano Valverde y el británico Froome junto al tercero en discordia, el catalán Purito.

Por delante cinco días en los habrá "momentos para todo, montaña, media montaña que en Galicia es muy exigente y habrá que estar atento a los posibles ataques, además de la contrarreloj del último día", según el análisis del líder.

La jornada lucense por los inéditos Ancares como final de etapa siembra el miedo entre los candidatos al triunfo y al podio, pero todos señalan al británico de origen keniano como posible protagonista de un intento desesperado, como el de Alberto Contador en Fuente Dé en 2012 que tan buenos frutos le dio, por hacer saltar la clasificación en la Vuelta.

Un día propicio bien podría ser el final en rampa en Monte Castrove, o también el siguiente con la jornada rompepiernas de Cangas do Morrazo, aunque como lo serán todas en Galicia durante estos cinco días.

El postre final será la contrarreloj de bolsillo de 9,9 kilómetros como colofón de la carrera en la que si los tiempos están ajustados la emoción no faltará.

Contador no se fía de los que le persiguen a pesar de tener "la tranquilidad" de que son el resto los que le tienen que sacar diferencia. El resto son Valverde, Froome y Purito Rodríguez que bien podrían aprovechar la jornada de descanso para buscar la inspiración para despojar al de Pinto de su preciada prenda "roja" en la mitológica Torre de Hércules. EFE.

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