San Sebastián.- El Lagun Aro GBC, tras su victoria contra el Estudiantes del pasado domingo, sigue ilusionado con la clasificación para la Copa del Rey y para dar continuidad a ese sueño precisa un triunfo este miércoles en casa del Joventut.
El equipo donostiarra tiene un calendario muy complicado, con Caja Laboral y Fuenlabrada como próximos rivales, pero a día de hoy es libre de soñar y motivarse con ese primer objetivo de la temporada que sería jugar la competición del K.O. en Bilbao.
El conjunto que entrena Pablo Laso está en un buen momento de juego, salvo el borrón contra Xacobeo de hace tres semanas y es muy competitivo en todos sus encuentros aunque enfrente tendrá un rival temible, que en su mejor nivel supone un muro casi infranqueable para las pretensiones de Lagun Aro.
La sonrisa ha vuelto a la cara de Laso tras comprobar la recuperación en los últimos partidos del polaco Michal Ignerski, realizó un gran encuentro ante Estudiantes, ya que de sus lanzamientos exteriores dependen buena parte de las opciones de victoria vascas.
La mejoría y la regularidad beneficia también al americano Barbour, tras un bajón de juego, y junto a Andy Panko y el base Sergio Sánchez el juego ofensivo de Lagun Aro parece ahora muy bien armado. El que por contra necesita progresar es el pívot Albert Miralles que ha bajado un peldaño su rendimiento en los últimos choques.
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