Jugar en casa suele ser una ventaja para el equipo local, que cuenta con el apoyo de su afición, que como cierta bebida energética da alas. Pero no siempre. Que se lo digan al Sevilla, que ante el Getafe parecía que jugaba en el Coliseum Alfonso Pérez y no en el Ramón Sánchez Pizjuán. Ambiente bastante gélido en la grada a pesar de la elevada temperatura por culpa del enfrentamiento entre el presidente del club hispalense, José María Del Nido, y los Biris, el grupo de aficionados más radicales.
"Del Nido a prisión, los Biris a Nervión", gritaban los ultras sevillistas pertenecientes a ese grupo. En lugar de animar a su equipo, los hinchas se dedicaban a recordar al máximo dirigente del Sevilla sus problemas con la justicia en el 'caso Minutas'. Del Nido ha sido condenado a siete años y seis meses de cárcel en ese proceso. Antes del partido, los ultras ya habían realizado más protestas contra su presidente.
En el campo, los gritos decrecieron con los goles de Fazio y Álvaro Negredo, éste de penalti, pero volvieron a cobrar fuerza cuando Alexis Ruano acortó distancias en el marcador. Otro cántico que se pudo escuchar en el Sánchez Pizjuán fue el de "hola, Don Manuel", con el que los Biris comparaban a Del Nido con el exdirigente del Betis, el club rival, Manuel Ruiz de Lopera.
¿Por qué este enfrentamiento?
La relación entre Del Nido y los Biris ha sido de amor y odio, pero en los últimos tiempos ha empeorado. La gota que colmó el vaso llegó con los graves incidentes que algunos aficionados de ese grupo radical protagonizaron en un amistoso del Sevilla en el estadio Arturo Puntas Vela ante la Roteña. Bengalas, invasión del campo, peleas con hinchas rivales… Las cámaras de televisión captaron al dirigente del equipo sevillano atacando duramente a sus aficionados.
"¡Qué hijos de putas son los Biris estos! Donde van, forman el lío. ¡Qué vergüenza! La Policía podría haberlos cogido", declaraba Del Nido. Palabras que no sentaron nada bien a los Biris, como tampoco lo hicieron las nuevas medidas del presidente respecto a los abonos y la entrada en el campo.
La primera fue suspender hasta nuevo aviso la renovación de abonos en la grada baja de Gol Norte. Justo la zona del campo donde se ubican los Biris. Además, estos ultras protestan también contra otras medidas que los afectan: cacheos a todos los que entran en dicha zona y la prohibición de entrar en las instalaciones sin el DNI.
Al final, en un Sánchez Pizjuán con bastante calvas en la grada, el Sevilla venció 2-1 al Getafe en un estreno liguero que se va a recordar por el enfrentamiento entre los hinchas y su presidente y no por el partido en sí.
Sigue @jorgekosky
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