En su temporada de estreno como profesional, la Primera División femenina del fútbol español ha experimentado un salto de gran calibre, tanto en el terreno de juego, como en el económico. Televisiones, patrocinadores y el Consejo Superior de Deportes han apostado muy fuerte por la bautizada 'Liga F', que está a la espera de encontrar un patrocinador oficial que lleve el 'naming' que hasta ahora pertenecía a Iberdrola, pero el cambio de organizador de la competición ha provocado que perdiera la marca (tiene acuerdo con la RFEF) y ha provocado bastante interés por parte de diferentes empresas para ser el patrocinador principal, entre ellas la propia firma energética.
Si algo le ha faltado al fútbol femenino para consolidarse en la élite del deporte español ha sido contar con un alcance televisivo a su altura. Es por ello, que DAZN se hizo con los derechos audiovisuales para emitir toda la competición durante cinco temporadas tras firmar un contrato por 35 millones de euros, más uno que abonará Mediapro por el partido en abierto y los resúmenes. En cuanto al reparto de la financiación de los derechos, se está a la espera de un Real Decreto del Gobierno, que adapte el sistema de reparto del dinero por televisión.
Otro impulso económico que recibirá esta competición es el resultado del acuerdo entre la nueva Liga Profesional de Fútbol Femenino (LPFF), que preside Beatriz Álvarez, con LaLiga para la comercialización de los patrocinios y acuerdos comerciales, por el que se ha asegurado 42 millones de euros. En este caso, su distribución se hará de forma progresiva, de tal manera que en esta temporada la liga repartirá seis millones, que se elevarán hasta los ocho millones anuales en las dos siguientes. Los 20 millones que restan se repartirán entre las dos últimas campañas del contrato, que expira en 2027.
A su vez, a comienzos de este año el Consejo Superior de Deportes (CSD) puso en marcha un plan de ayudas, por el cual se inyectaron 18 millones de euros, exclusivamente, para modernizar las infraestructuras de los clubes que componen la categoría reina del fútbol femenino español. Real Madrid y Barcelona se sitúan en la cola de estas ayudas, ya que no han tenido que realizar las reformas requeridas para revalorizar la competición. Son los clubes independientes de la liga, Madrid CFF, Tenerife y Sporting Huelva, los más favorecidos de estos recursos, con ayudas de más de 1,3 millones de euros para cada uno.
Barcelona y Real Madrid, en cabeza
En cuanto a los presupuestos que maneja cada equipo para esta temporada, el Fútbol Club Barcelona sigue siendo el trasatlántico de la competición tras disparar su presupuesto hasta los 12 millones de euros y se encamina hacia la rentabilidad en 2022-2023. Le sigue el Real Madrid, el equipo que busca romper la hegemonía blaugrana, con 6 millones (un 40% más que la temporada pasada).
No obstante hay muchos equipos que no presentan de manera oficial sus cuentas, ya que dependen de la estructura global del club, donde en ciertos casos se adjuntan a la sección masculina. Por su parte, el CSD ha reservado 2 millones de euros para los dos equipos recién ascendidos a la máxima categoría del fútbol profesional, Alhama El Pozo y Levante Las Planas.
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