Lissavetzky, sobre el posible pacto con Qatar: "Vamos limpios, no interferirá en la votación"

A finales del mes de octubre, se reveló que la FIFA había abierto un expediente a la Candidatura Ibérica por la posibilidad de que hubiese pactado con la de Qatar, que aspira a la cita de 2022, el intercambio de votos.

"Hay un asunto de una cierta denuncia de acuerdo con Qatar y se ha abierto un expediente informativo, pero no creo que vaya a provocar una interferencia en la votación y vamos 'limpios'", señaló Lissavetzky, en su intervención en el 'Foro dos Portugueses', que se está celebrando en Madrid.

De todos modos, dejó claro que es "difícil" que esta afirmación estuviera basada en "garantías". "Yo, como Gobierno de España, no he tenido contacto con nadie. Lo que se dice es que se podía haber llegado a un acuerdo y no he leído nada en relación a una supuesta compra de votos", comentó.

"Hay dos señores que puede que, según esta versión de la prensa inglesa, podrían haber intentado cambiar su voto por dinero, pero España y Portugal no tienen nada que ver con eso. Hay un expediente informativo y si la acusación es de un cambio de votos, lo voy a decir muy claro, es de risa, no sé cual es el problema", añadió.

Para el dirigente, además, "esto hay que demostrarlo". "Todo el mundo habla con todo el mundo y otra cosa es que para que te voten ofrezcas cosas a cambio. La RFEF me ha dicho que no se prevé que este hecho tenga efecto alguno, yo no tengo datos negativos", reiteró.No ve a Rusia favorita para conseguir el Mundial 2018

El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD) se refirió también a que la votación en la FIFA "siempre es democrática" y que el organismo tiene algo "muy interesante" en lo referente a la rotación de continentes. Así, recordó que para 2018 quedan cuatro candidaturas, "luchando con parámetros más homogéneos", y que de todos los rivales, "Rusia está jugando muy fuerte y está llevando una actuación para organizar acontecimientos".

"Tiene mucho deseo de serlo, pero de ahí que sea favorita, ¿por qué?. Las distancias son mayores, nosotros tenemos mejores comunicaciones, necesitamos menos inversión en tiempo de crisis. La ventaja para Rusia es que no se ha hecho nunca un Mundial allí, pero cómo pesará eso en los 24 votantes no lo sé, todo es tan subjetivo", prosiguió.

Igualmente, pidió que para convencer a la FIFA se lleve "a lo mejor del deporte español y portugués", citando como ejemplos a Fernando Hierro, Luis Figo, José Mourinho o Vicente del Bosque para dar "mas sensación de fuerza y dar imagen de deporte".

Sobre la candidatura conjunta, Lissavetzky opinó que es producto "del buen momento de relaciones con Portugal" y subrayó que acoger el Mundial es "un reto fundamental y compartido" con los "hermanos de Portugal". "Es una aventura arriesgada, pero que merece la pena y más con los tiempos que corren", apuntó, al tiempo que recordó que ambos países están "preparados para hacerlo en un año".

Así, el secretario de Estado para el Deporte remarcó la inversión de 200.000 millones de euros en los últimos 6 ó 7 años para "mejorar los estadios", y apeló a la "tradición futbolística" de ambos países, reflejado a la Eurocopa de 2004, "un ejemplo a seguir" o el ya lejano Mundial de 1982. "Estamos en condiciones para decir que tenemos un punto de partido muy fuerte, no partimos de cero, y tenemos adversarios que respetamos y muy potentes", aseguró."Proyecto ambicioso, con corazón y razón"

Lissavetzky también recalcó que sortearon "los problemas jurídicos" por ser una candidatura conjunta, ya que la FIFA no había salido "satisfecha" de la experiencia de 2002 en Corea y Japón, y que los dos gobiernos han trabajado "duro y codo con codo" para aprobar ciertas "garantías, que no son sencillas, para que el Mundial se celebre sin que falte nada".

En este sentido, elogió las condiciones de alojamiento de España y Portugal, la existencia de 82 campos base perfectamente equipados, un 25 por ciento más que los requeridos por FIFA", y las infraestructuras con "más de 50 aeropuertos, y todas las ciudades a una hora de vuelo de centro de península y más de 2.000 kilómetros de red de Alta Velocidad".

Igualmente, habló que los dos países cuentan con unas de las "menores tasas de criminalidad de Europa" y que en el proyecto hay 21 estadios, "siete catalogados de la máxima categoría por la UEFA". "Se pueden jugar la final, las semifinales y el tercer y cuarto puesto en cinco estadios diferentes".

"Es un proyecto ambicioso y bien realizado. Se ha hecho con corazón y razón, con cariño, pero con mucha experiencia. Siempre en el camino se encuentran obstáculos, nunca es fácil. El Mundobasket de 2014 lo veía perdido y lo sacamos en la recta final, y fue lo contrario con los Juegos. Sería una alegría y un broche de oro conseguirlo", sentenció Lissavetzky.