Llera destaca el "sabor especial" del título mundial al ganar a potencias reforzadas

Oviedo.- El campeón del mundo Fran Llera ha declarado hoy a su llegada al aeropuerto de Asturias, tras proclamarse el domingo campeón del mundo de piragüismo de relevos en K-1 200, que haber revalidado el título conseguido el pasado año tiene un "sabor especial" en esta ocasión por conseguirlo ante las grandes potencias, que reforzaron sus relevos con campeones olímpicos y mundiales de velocidad.

Así lo ha manifestado el palista del Feve Oviedo Kayak a su llegado al Principado, procedente de la ciudad polaca de Poznan donde España finalizó ayer sus participación mundialista con un total de tres medallas logradas, además del oro en el relevo K-1 200, en K-2 200, donde los campeones olímpicos Saúl Craviotto y Carlos Pérez Rial fueron plata, igual que José Luis Bouza en C-1 5.000.

Llera, que compitió además en el Campeonato del Mundo 2010 en la prueba de K-1 500, en la que obtuvo un segundo puesto en final C, ha sido uno de los integrantes del relevo español, que completaron Saúl Craviotto, Carlos Pérez Rial y Pablo Andrés.

La consecución por segundo año del título mundial de relevos, a juicio del palista de Ribadesella, tiene en esta ocasión el valor de haberlo ganado en "plena revalorización" de esta nueva prueba, incluida el pasado año en el programa mundialista, y que de acuerdo al interés que ha suscitado por parte de los equipos ha obligado a la organización a celebrar series clasificatorias.

Llera pondrá fin a la temporada el próximo fin de semana con su participación en el Campeonato de España sénior, en que competirá para contribuir a aportar puntos a su club.

Junto al campeón mundial han llegado al aeropuerto de Asturias su compañera de selección, la kayakista del Gauzón, Isabel García, que fue séptima en final B de K-1 500, y el entrenador del equipo nacional, responsable de la preparación de Llera, Miguel García.