Lopera dice que su nueva imputación confirma las "anomalías" del proceso

  • El abogado de Manuel Ruiz de Lopera ha dicho que la nueva imputación que le ha hecho la juez Mercedes Alaya "confirma y compendia las anomalías procesales" que sufre su cliente en la causa penal por su gestión en el Real Betis.

Sevilla, 14 dic.- El abogado de Manuel Ruiz de Lopera ha dicho que la nueva imputación que le ha hecho la juez Mercedes Alaya "confirma y compendia las anomalías procesales" que sufre su cliente en la causa penal por su gestión en el Real Betis.

El abogado de Ruiz de Lopera, que desea permanecer en el anonimato, afirma en su escrito que la venta de las acciones del Betis titularidad de su empresa Farusa fue descartada como objeto de investigación penal por la Audiencia de Sevilla desde el año 2008.

La juez instructora, Mercedes Alaya, ha citado a Ruiz de Lopera el próximo 23 de diciembre para ampliar los delitos societarios que le imputa en la gestión del club a un nuevo delito derivado de la venta, en julio de 2010, de las acciones de Farusa a la empresa Bitton Sport, propiedad de Luis Oliver.

Según el abogado de Lopera, una vez que la Audiencia de Sevilla afirmó "sin lugar a dudas que la cuestión de las acciones era ajena a la presente causa penal", su cliente entabló con la nueva entidad interesada unas "largas y duras negociaciones" que culminaron con la venta de su paquete de acciones.

Dicha venta, además, "fue conocida e investigada hace más de tres años por el juzgado" y la juez se ha referido a ella en numerosas ocasiones "sin que, ni hace años ni ahora, las incluyera en la imputación".

Pero además, después de que la Guardia Civil investigara la venta a Bitton Sport, el propio Ruiz de Lopera pidió una ampliación de las indagaciones para determinar el origen de los fondos empleados por Oliver y demostrar que no se trataba de una "venta simulada" y el juzgado lo denegó.

Ahora, le acusan por unos hechos ocurridos hace más de tres años y sobre la base de "una sospecha que se nos impidió despejar".

Desde entonces, añade el escrito, no ha aparecido ningún dato nuevo que justifique la ampliación de la imputación, por lo que la actuación de la juez Alaya "ha creado una zona de sombras" sobre ciertos hechos que se niega a investigar pero luego utiliza para incriminarle a petición de la Liga de Juristas Béticos, una de las plataformas acusadoras en esta causa.

Entiende que Ruiz de Lopera está sufriendo una "efectiva indefensión" y que la nueva imputación "al ser objetiva y abiertamente contradictoria con numerosas actuaciones judiciales previas, confirma y prolonga el anómalo curso procesal de estas actuaciones".

Ruiz de Lopera ha sufrido unas "anomalías procesales significativas, persistentes y continuadas", sostiene su defensa.

El escrito sugiere que la Liga de Juristas Béticos está buscando una dilación del procedimiento para "alargar el punto final" a que está abocada la causa "y por tanto las medidas cautelares" que retiraron a Ruiz de Lopera el control del club.

La nueva imputación del ex máximo dirigente del Betis se ha producido cuando la juez Alaya está a punto de cerrar la instrucción del caso, una vez ratificado el informe de los peritos judiciales que aseguran que, en las temporadas 1999 a 2008, Lopera perjudicó económicamente al Betis en 17 millones de euros y en otros 12,4 millones de euros en las temporadas 1993-98.

En estas diligencias están imputados el propio Ruiz de Lopera, el exvicepresidente Ángel Martín y otros seis acusados, trabajadores contratados por el ex máximo accionista del club o supuestos testaferros de sus empresas.

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