Alcobendas (Madrid), 14 mar.- Los favoritos cumplieron con los pronósticos y los cuatro primeros clasificados de la División de Honor femenina -Bera Bera, Helvetia Alcobendas, Rocasa Ace Gran Canaria y Mecalia Guardés- disputarán mañana las semifinales de la Copa de la Reina que se celebra en la localidad madrileña de Alcobendas.
Un guión en el que jugaron un papel protagonista las guardametas, pues si Cristina Maestro con una última parada a lanzamiento de la paraguaya Marizza Faría fue determinante en el triunfo (17-18) del Mecalia Atlético Guardés sobre el Mar Alicante, no menos importante fue el papel de Silvia Navarro (Rocasa) y Estela Carrrera (Alcobendas).
Menos trabajo tuvo Ana Temprano la guardameta del Bera Bera, el vigente campeón, que se impuso con facilidad por 18-29 al Prosetecnisa Zuazo, en un encuentro en el que por encima de cualquier individualidad, sobresalió la fortaleza colectiva del conjunto donostiarra.
Una circunstancia que permitió al técnico Imanol Álvarez, tras dejar sentenciado ya el choque al descanso (10-18), aprovechar la segunda mitad para repartir esfuerzos, pensando en la semifinal que tendrán que disputar en menos de veinticuatro horas con el Mecalia Atlético Guardés.
Lujo que no pudo permitirse el conjunto gallego, que debió poner a todas sus estrella sobre la pista, incluida la extremo Carmen Martín, que acabó jugando en el lateral, para evitar la remontada del Mar Alicante, que pese a llegar a ir perdiendo de hasta seis goles (7-13) al inicio de la segunda mitad, dispuso de un último balón para forzar la prórroga.
Sin embargo, la portera Cristina Maestro, la mejor de un Mecalia muy irregular, adivinó el lanzamiento de la paraguaya Marizza Faría, evitando la sorpresa que hubiera supuesto la eliminación de las primeras de cambio del cuarto clasificado de la División de Honor femenina.
Menos agónica, aunque igualmente decisiva fue la actuación de la guardameta del BM. Rocasa Ace Gran Canaria Silvia Navarro, que con dos transcendentales paradas, una a lanzamiento de siete metros de la croata Maja Popovic, otorgó el triunfo (22-24) a las canarias sobre el Elche-Mustang.
Una victoria que premió la mayor capacidad de las isleñas para manejar la presión de unos minutos finales, en los que el cuadro alicantino se condenó a la derrota, asustado como pareció por momentos ante la posibilidad de ganar.
Miedo del que careció por completo Silvia Navarro, la portera de la selección, que con sus intervenciones en los minutos finales liberó por completó a un Rocasa, vigente subcampeón, que buscará mañana ante el Helvetia Alcobendas una nueva final.
El mismo objetivo con el que afrontó la Copa de la Reina el conjunto madrileño, segundo clasificado de la División de Honor femenina, al que hoy le bastó con tan solo treinta minutos para solventar su pase a semifinales, tras derrotar por 32-25 al Balonmano Porriño.
Un triunfo en el que fue decisiva la actuación de la portera Estela Carrera, que desesperó por completo a las gallegas con sus paradas y más paradas en un primer tiempo, en el que el Porriño, superado por completo por la defensa del Helvetia Alcobendas, encadenó diecisiete minutos sin anotar.
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