Löw transforma a la Alemania física de los 90 en la del tiki taka

    • Löw tiene la oportunidad de callar muchas bocas si ese estilo de toque que le ha llevado a la final le da la Copa del Mundo. La solución, a las 21.00 horas.
    • "Quiero que Alemania juegue como España" dijo en varias ocasiones el técnico, de modo que fue cambiando paulatinamente el sistema y los jugadores.
"Si nos ganan nada se desmoronará", dice Low
"Si nos ganan nada se desmoronará", dice Low
Manu Azpicueta

Joachim Löw juega su segundo Mundial y su segunda final con Alemania. El técnico germano se hizo cargo de la selección germana tras la marcha de Jürgen Klismann, que consiguió el tercer puesto en el campeonato disputado en Alemania en 2006. Löw era el ayudante y el encargado de diseñar las tácticas y fue el sustituto perfecto para el actual seleccionador de Estados Unidos.

Con Löw se buscaba continuidad, pero nada más lejos. Al técnico alemán le tocó dos veces bailar, no con la más fea, sino con la que mejor bailaba, España. La final de la Eurocopa 2008 marcó un antes y un después en la idea del seleccionador alemán de cómo debía jugar su equipo. El grupo de 'locos bajitos' de 'La Roja' que tocaban la pelota con una precisión y calidad que saltaba a la vista le dejó enamorado. "Quiero que Alemania juegue como España", pensó e incluso dijo en varias ocasiones el técnico germano, de modo que fue cambiando paulatinamente el sistema y los jugadores hasta encontrar lo que buscaba, el tiki taka.

En el Mundial de 2010 llegó el primer ensayo. Alemania quería jugar como España, pero aún mantenía 'vicios' de la vieja Alemania con una defensa 'rocosa' y una delantera con dos 'killers' los polacos de nacimiento Podolski y sobre todo, Klose. La transformación fue paulatina y aunque Alemania jugó un gran fútbol en Sudáfrica, de nuevo España les despertó del sueño en el mejor partido de ese Mundial. Al final, revalidó el tercer puesto obtenido en el campeonato anterior frente a Uruguay, pero Löw quería más.

En este 2014, Löw ha dado con la tecla y ha cambiado por completo el estilo alemán. Solo hay que fijarse en algunos detalles de su lista. Solo hay un '9' puro, Klose, que ha batido el récord de goles de Ronaldo en los mundiales. Löw tenía previsto jugar con 'falso 9' como hizo Del Bosque en la Eurocopa y el elegido para esa tarea era Götze, pero el jugador del Bayern no dio el rendimiento esperado. Junto a él, más jugones como Müller, y Özil en los flancos como apoyo todos ellos respaldados por un doble pivote con Schweisnteiger y Khedira. En ese mediocentro uno sube, Khedira-como hace Xabi Alonso con España- y otro cierra, Schweisnteiger-como hace Busquets en España-.

En el centro de la defensa juega Hummels, un central rápido que sabe sacar la pelota jugada. En la Euro 2008 el centro de la defensa lo formaban dos 'rocas' Mertesacker y Metzelder, lentos, pero fiables. El primero de ellos sigue siendo titular, pero Löw ha utilizado la fórmula española combinando un central rápido con otro contundente, como hace del bosque con Ramos (rápido) y Piqué (contundente). Además se ha decidido por laterales de largo recorrido como son Lahm y Höwedes.

Grandes como Beckenbauer-último entrenador campeón el mundo con Alemania- y Lothar Mätthaus han alabado este nuevo estilo, pero no tanto el pueblo alemán, que recuerda más a la Alemania rocosa, física y fuerte que creó aquel refrán que decía "El fútbol es un deporte en el que juegan once contra once y siempre gana Alemania". Löw tiene la oportunidad de callar muchas bocas si ese estilo de toque que le ha llevado a la final le da la Copa del Mundo. La solución, a las 21.00 horas.

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