Tres mamás superdeportistas con los ojos puestos en el sueño olímpico

Varias de las madres deportistas que han participado en anteriores JJOO o que pelean por estar en Río son españolas. Algunas de las más conocidas son la nadadora paralímpica Tersa Perales, la atleta Natalia Rodríguez o la piragüistas Maialen Chourraut. Además, Nuria Fernández, Marina Alabau y Teresa Portela relataron recientemente a lainformacion.com la experiencia de compatibilizar el deporte de élite y la maternidad.Nuria Fernández, a por Río con 40 años y tres hijas

Es la actual campeona de España de los 3.000m en pista cubierta y lo logró a los 39 años tras haber sido madre de tres hijas. Los Juegos de Río son su objetivo y allí competiría con 40 años. El secreto de Nuria Fernández para seguir al máximo nivel es sencillo:

"A mí ser madre me ha sumado mucho más de lo que me ha restado, porque yo era una persona que me comía mucho la cabeza y estaba pensando las 24 horas en el deporte.  De esta manera ni tengo tiempo ni tengo ganas de estar pensando todo el rato. Ahora mismo estoy viviendo un atletismo de regalo, de felicidad", asegura.Con 13 campeonatos de España a sus espaldas, la vida deportiva de Nuria cambió completamente cuando en 2007 fue madre por primera vez, aunque tenía claro su futuro.  Cuando fui una de las primeras en España en ser madre y tener intención de volver a la élite, me decían, 'tú estás loca', y no solo lo conseguí, sino que obtuve mi primera medalla con 33 años", señala. Y es que para Nuria Fernández, madre de Candela, Valentina y María (8 años, 2 años y 10 meses, respectivamente), la maternidad fue clave para seguir en el deporte. Marina Alabau, oro en Londres y madre de MartaDaddy love ❤️ surfing 🏄

We love ❤️ daddy. pic.twitter.com/42JVZ2OQTm— marina alabau (@AlabauMarina) 4 de septiembre de 2015

Andaluza de 30 años, ganó el oro olímipico en Londres 2012 sueña con repetir una medalla en los JJOO empujada por el viento y sobre las olas de Río en la categoría RS:X de windsurf.

En 2013, solo un año después de su gran éxito olímpico, nació su hija Marta, y su vida cambió. "Se puede compatibilizar ser madre y deportista de élite, pero necesitas mucha ayuda a tu alrededor. Tengo la suerte de contar con mis padres y mis suegros que nos ayudan mucho. Mi marido es mi entrenador y también me ayuda", señala.

"Desde que soy madre viajo un poco menos de lo que viajaba normalmente y me tengo que programar con mucha antelación los entrenamientos. Además, soy menos flexible con los horarios. Siempre tengo que estar pendiente de Martita y de que sea lo mejor para todos", explica.Teresa Portela, 31 metales y una niña llamada NairaFeliz Día de la madre! Contenta con el día de hoy, un 6 puesto en el Europeo.A seguir trabajando! pic.twitter.com/4Mm9GqMBXF— Teri Portela (@teriportela) 3 de mayo de 2015

Un total de 31 medallas en Europeos y Mundiales de piragüismo tienen hueco en su palmarés desde 2001 y su gran objetivo es clasificarse para los JJOO de Río. Hace unas semanas Teresa conseguió el bronce en los Mundiales de piragüismo de Milán en la modalidad de K1 200 un año y medio después de ser madre."Todas las medallas son muy especiales ya que detrás de cada una hay mucho sacrificio y trabajo. Sin embargo, me quedaría con esta última. Ha sido un año en el que he tenido que parar debido al embarazo, y en el que ha nacido mi hija Naira. Sin duda alguna, tenerla ha sido un cambio enorme en mi vida. Cruzar la meta en Milán y verla a ella celebrándolo junto a mi marido fue muy bonito",Teresa vive actualmente en O Grove, una localidad costera situada a 40 kilómetros de Pontevedra, su ciudad de entrenamiento. Este es el día a día de una madre que al mismo tiempo es deportista de élite: "Me levanto a las 06.30 o 07.00 horas y me preparo yo para después hacer lo propio con la niña. La dejo en la guardería y pongo rumbo a Pontevedra. Entreno por la mañana y muchas veces recojo a mi hija para que pase la tarde con mis padres, mientras continúo con mis entrenamientos hasta las ocho".El mérito de su arduo trabajo adquiere una dimensión mayor al tener que estar "parada" después del embarazo. Para los deportistas de élite, cada día de entrenamiento es clave, y Teresa tuvo que recuperar unos niveles de fuerza que "habían bajado", en un proceso paulatino que fue de "menos a más" con el fin de evitar las "lesiones".Las ayudas del Gobierno a las madres deportistas

El Consejo Superior de Deportes (CSD) convocó en 2014 las primeras ayudas para madres deportistas de alto nivel. “Recibimos seis solicitudes y entregamos a cada una de ellas 3.000 euros”, explica Susana Pérez Amor, subdirectora general del Programa Mujer y Deporte del CSD. También otorgaron otros 8.600 euros para cuidado de hijos. Este año las solicitudes se duplicaron (de 6 a 13): 37.530 euros por nacimientos y 20.000 por guarderías. “Cada madre recibió 2.502 euros como máximo por nacimiento porque, pese a duplicar el presupuesto, hubo más de los que habíamos previsto”, explica Amor.

Solo las deportistas de alto nivel (medallistas) pueden acceder a las ayudas por nacimiento. En el caso de la subvención para cuidador o guardería pueden solicitarla las de alto rendimiento (las que forman parte de la selección nacional). La regatista Alabau, que se benefició de ambas, cree que ese apoyo económico debería ampliarse “para que también pudieran beneficiarse mujeres que están en un nivel anterior, en el proceso de convertirse en medallistas”. Pérez Amor afirma que esas ayudas “son para que las deportistas que han tenido éxito no se retiren”, pero añade que les “gustaría” ampliarlas y que han encargado un estudio al respecto.