Marruecos, el Atlético y la "Perla Negra"

  • Tánger (Marruecos).- El Atlético está en Marruecos, en la ciudad de Tánger, donde hoy ha presentado un acuerdo de colaboración con el Raja Club Athletic de Casablanca para que el club marroquí entre a formar parte de una alianza estratégica con los rojiblancos.

Al presidente del Atlético le "da sana envidia el partido Madrid-Barcelona"
Al presidente del Atlético le "da sana envidia el partido Madrid-Barcelona"

Tánger (Marruecos).- El Atlético está en Marruecos, en la ciudad de Tánger, donde hoy ha presentado un acuerdo de colaboración con el Raja Club Athletic de Casablanca para que el club marroquí entre a formar parte de una alianza estratégica con los rojiblancos.

El Raja club Athletic es uno de los clubes con más prestigio del continente africano. Es el actual líder de la liga marroquí y el único club de Marruecos que posee tres Ligas de campeones africanas.

El Atlético quiere unir vínculos con el Raja, de la misma forma que ya lo ha hecho con el Sahanghai Shenhua de China, el Muanghtong United de Tailandia y el Al Ain de Emiratos Arabes.

De Marruecos tiene el Atlético un grato recuerdo. En ese país norteafricano nació hace casi un siglo Larby Ben Barek, la "Perla Negra".

Ben Barek fue uno de los mejores extremos del mundo en los años que transcurrieron desde 1940 hasta 1954 y el Atlético tuvo el honor de tenerlo en sus filas desde 1948.

Nacido en Casablanca en 1917, la "Perla Negra" destacó desde muy pronto por su habilidoso regate y su rapidez. Tanto que el Casablanca, con el que empezó a jugar en 1934 en Segunda División, no pudo retenerlo y Ben Barek se marchó al Unión Deportiva Marruecos hasta 1938.

Desde allí es traspasado a Francia, al Olympique de Marsella, donde adquiere su verdadera resonancia internacional. Tras otro breve paso por Marruecos, vuelve a Francia, al Stade de Reims y el el Atlético lo ficha en 1948.

En el club rojiblanco, Ben Barek permaneció seis temporadas y ganó dos ligas, siendo una de las grandes sensaciones de los madrileños y gran atracción para los aficionados en todos los campos de España.

Su debut en el Atlético se produjo en Sarriá, ante el Español, que goleó a los rojiblancos por 4-1.

La llegada de Ben Barek a la entidad madrileña fue costosa. En Reims coincidió con Marcel Domingo y con el Stade visitó el estadio Metropolitano para jugar contra el Atlético en un partido en el que asombró por su velocidad y desmarque. Por su fútbol moderno, adelantado a la época.

Su actuación fue definitiva para que el Atlético diese el do de pecho para incorporarlo a sus filas, lo que consiguió finalmente en la primavera de 1948.

Ben Barek se convirtió enseguida en el ídolo de la afición, que llenaba el viejo estadio Metropolitano para ver las evoluciones de la perla africana. Fue el primer jugador africano en triunfar en Europa.

En la temporada 49-50 y con Helenio Herrera como entrenador, los rojiblancos formaron la histórica delantera de cristal integrada por Ben Barek, Carlsson, Juncosa, Escudero y Pérez Payá. El Atlético ganó esa liga y la siguiente y Ben Barek, que militó con los rojiblancos hasta 1954, asombró por sus cualidades.

Así lo confirmó a EFE Lázaro Albarracín, vicepresidente del Atlético, también desplazado a Tánger. "Yo tuve la suerte de verlo jugar en el Metropolitano. Era excepcional. Un media punta extraordinario por su técnica, regate y velocidad. Ahora sería un crack en el Atlético. Podría jugar con el Kun. Se podría comparar con Eto'o. En aquella época, el Atlético goleaba en el Metropolitano a muchos rivales. Eran partidos con muchos goles".

Por su parte, Enrique Cerezo señaló que "Ben Barek está entre los quince mejores jugadores de la historia del Atlético".

Dos días después de que el colombiano Luis Amaranto Perea igualase a Griffa como extranjero que más veces ha vestido la elástica rojiblanca, Ben Barek (fallecido en septiembre de 1992), que lo hizo en 114 ocasiones, también está de actualidad.

Si el Atlético encuentra otra perla como la de Ben Barek en su alianza con el Casablanca habrá firmado el mejor acuerdo posible. De momento, ha conseguido rescatar del recuerdo a uno de sus mejores valores.

Jenaro Lorente

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