Molina pega imparable y Álvarez impulsó la carrera del honor

  • El receptor puertorriqueño Yadier Molina volvió a estar oportuno con el bate y ayudó a los Cardenales de San Luis a conseguir el pase a la Serie de Campeonato de la Liga Nacional tras eliminar a los Piratas de Pittsburgh.

Redacción Deportes (EEUU), 9 oct.- El receptor puertorriqueño Yadier Molina volvió a estar oportuno con el bate y ayudó a los Cardenales de San Luis a conseguir el pase a la Serie de Campeonato de la Liga Nacional tras eliminar a los Piratas de Pittsburgh.

El tercera base dominicano Pedro Álvarez fue el único que tuvo respuesta en la ofensiva de los Piratas al producir la única carrera que anotó su equipo.

Molina pegó imparable y ayudó a los Cardenales a vencer por 6-1 a los Piratas en el quinto y decisivo partido de la serie divisional del "Viejo Circuito".

Con su victoria, la segunda consecutiva, los Cardenales dejaron marca de 3-2 en la serie que se jugó al mejor de cinco.

El receptor tuvo dos viajes a la caja de bateo e hizo una vez contacto con la pelota, además de poncharse un vez y dejar en .294 su promedio de bateo.

En la fase divisional Molina hizo un total de 17 viajes a la caja y pegó en cinco imparables, incluido un vuelacercas en la derrota de los Cardenales por 1-7 contra los Piratas, remolcando una anotación, recibió tres bases por bolas y tres veces fue retirado por la vía del ponche.

"Todo el equipo ha vuelto a estar impecable en los momentos decisivos y conseguimos la meta de seguir en la competición", declaró Molina. "Ahora debemos centrarnos sólo en los Dodgers y estar listos para volver a la Serie Mundial".

Mientras que su compatriota el guardabosques derecho Carlos Beltrán se fue en blanco en cuatro oportunidades con el bate y logró .222 de promedio.

Pero a lo largo de la serie contra los Piratas fue bate clave al remolcar seis carreras en 18 oportunidades y pisó tres veces la registradora.

El boricua pegó dos cuadrangulares en las cuatro ocasiones en que hizo contacto, que lo colocaron con 16 en la competición de la fase final, marca que le permitió superar al legendario Babe Ruth, además de recibir tres bases por bolas y una vez ser retirado por la vía del ponche.

Por los Piratas, Álvarez fue el único que respondió cuando en la séptima entrada pegó sencillo a la segunda almohadilla para mandar a la registradora al primera base canadiense Justin Morneau con la única carrera de la novena de Pittsburgh.

Álvarez tuvo cuatro oportunidades con el bate, pegó un imparable y remolcó una carrera, la del honor.

Mostrar comentarios