Naroa Agirre consigue su décima corona en pértiga con 4,35

Sabadell (Barcelona), 25 feb.- La donostiarra Naroa Agirre, plusmarquista española de pértiga (4,56), tuvo que esperar unos segundos con el listón cimbreándose para ganar, con una marca de 4,35, su décimo título de campeona de España de pértiga en pista cubierta, en cerrada lucha con Anna Pinero.

Agirre se incorpora, de esta forma, al selecto club de atletas con diez o más títulos de España bajo techo, integrado hasta hoy por doce y encabezado por el lanzador de peso Manuel Martínez con 16.

La primera final de los 48 Campeonatos de España se resolvió en un duelo entre la atleta local, Anna Pinero, campeona al aire libre, y Agirre, que llegaba a Sabadell con un registro de 4,25 y el objetivo de vencer con una marca que le permitiera afrontar luego con optimismo el ataque a los 5,40 que necesita para acudir a los Juegos Olímpicos de Londres. Se trata de la mínima B, con la que solo puede ir un atleta por país. La A son 10 centímetros más.

Agirre comenzó a saltar en 3,85, igual que Pinero. Las dos pasaron a la primera. Fue a partir de 4,15 cuando empezó el mano a mano entre ambas, pero la saltadora local tomó la delantera al saltar esa altura a la primera.

La donostiarra, que había necesitado dos saltos, se enfrentó a los 4,25 con la presión de tener que superarlos a la primera, por lo que pudiera pasar en 4,35, y lo consiguió, pero también lo hizo Pinero.

Los 4,35 sentenciaron. A la tercera, Agirre tocó el listón pero no lo bastante para derribarlo, y a continuación falló Pinero. La donostiarra ganaba con cinco centímetros más que el año pasado en Valencia.

La discípula y esposa de Jon Karla Lizeaga no pudo con los 4,40 pero, recuperada de sus eternos problemas de espalda -se operó de una hernia discal en 2009-, parece en disposición de poder hacerlo al aire libre para acudir a la cita olímpica de Londres con el recuerdo de su sexto puesto -y diploma- en Atenas 2004.

De su evolución en lo que resta de temporada dependerá que la atleta donostiarra, de 32 años, alargue su carrera deportiva o cuelgue definitivamente la pértiga.