Pizzi supera los puntos de Djukic, pero al Valencia se le escapa el objetivo

Alfonso Gil

Valencia, 7 abr.- El técnico del Valencia, Juan Antonio Pizzi, ya ha superado los puntos que obtuvo su predecesor, Miroslav Djukic, pero no ha evitado que al equipo se le escape el objetivo de disputar la próxima edición de la Liga Europa.

Frente a los veinte puntos que alcanzó Djukic en los dieciséis primeros partidos de Liga, Pizzi ha logrado veintiuno en los quince que lleva en el Valencia.

Pese a mejorar los registros anteriores, la actual situación clasificatoria deja al Valencia muy lejos de la séptima plaza, ya que la distancia con el Villarreal es de ocho puntos, más uno por la diferencia particular de goles.

Por tanto, el Valencia tiene que apelar a una reacción épica sin apenas precedentes para alcanzar la Liga Europa en las seis jornadas que restan para el final del campeonato.

El otro asunto pendiente es el de la Liga Europa, en la que también está obligado a realizar una gesta para estar en semifinales.

Tras un 3-0 en contra en Basilea el pasado jueves, debe ganar en Mestalla por cuatro goles de diferencia para alcanzar la penúltima ronda del torneo, en la que en el caso de golear a los suizos no encontrará rivales fáciles, ya que Juventus y Benfica son favoritos para estar en esa ronda, junto al ganador del Sevilla-Oporto.

La temporada del Valencia no deja resquicios para el optimismo. La trayectoria en la Liga Europa era el último motivo de esperanza, pero se frustró con la goleada de Basilea.

El Valencia ha estado marcado por la falta de intensidad de la etapa de Djukic,que se ha convertido en un lastre. El equipo ni jugaba, ni peleaba.

Con la llegada de Pizzi, el Valencia mejoró en su esfuerzo y resultados, pero poco a poco empezó a dar una de cal y dos de arena, hasta el punto de que la lucha y el sacrificio no han sido suficiente argumento para recuperar posiciones.

El fichaje de jugadores como Keita, Senderos o Vargas y la titularidad de Paco Alcácer hizo atisbar una cierta mejoría, sobre todo en cuanto a compromiso, pero finalmente los cambios no han incidido de forma sustancial sobre la clasificación.

La situación de esta campaña es diferente a la de un año antes, cuando el Valencia cambió de entrenador casi en el mismo momento de la temporada que ahora.

Entonces Mauricio Pellegrino dejó su puesto a Ernesto Valverde, quien recuperó al equipo y, aunque al final éste no llegó a la Liga de Campeones, sí que alcanzó la Liga Europa, algo que ahora causa envidia en el valencianismo.

El Valencia, situado en la tabla en tierra de nadie, se encuentra, además, mermado por las lesiones, ya que desde la llegada de Pizzi justo con el inicio del año 2014, muchos jugadores han tenido problemas físicos.

Los porteros Diego Alves y Guaita, así como Barragán, Ricardo Costa, Víctor Ruiz, Senderos, Keita, Oriol Romeu, Jonas o Piatti, entre otros, se han perdido encuentros por esta cuestión.

Por otra parte, el rendimiento fuera de casa también ha dejado mucho que desear y habría sido desastroso si el Valencia no hubiera ganado al Barcelona en el Camp Nou (2-3), en el que ha sido hasta el momento único triunfo forastero de la etapa Pizzi.

El técnico ha reconocido que el equipo no es "tan bueno" como se pensaba y prueba de ello son los numerosos goles desperdiciados en los últimos partidos, sobre todo en Basilea y el último domingo en Valladolid.

Seis partidos de Liga tiene el Valencia por delante para lograr una reacción sin precedentes o para cerrar una de las temporadas más adversas de su historia reciente y se va a medir a dos de los aspirantes al título, ya que el líder Atlético de Madrid jugará en Mestalla y el Valencia visitará al Real Madrid en su estadio.