El Real Madrid goleó al Manchester City en la final de la International Champions Cup de Australia y Sergio Ramos, primer capitán de la plantilla tras la marcha de Iker, no posó en la foto con sus compañeros ni levantó el trofeo, algo que hicieron entre Cristiano Ronaldo y Arbeloa.
Benitéz sustituyó al defensa y a Cristiano Ronaldo a falta de unos minutos para el final y ambos tomaron el camino de los vestuarios mientras eran aclamados por los aficionados. Ambos saludaron en un gesto de agradecimiento.
Pero al final del partido, solo el portugués salió del vestuario para recoger el trofeo. Pronto comenzaron las suspicacias en torno a Sergio Ramos, cuyo futuro en el Real Madrid se ha puesto en duda en las últimas semanas, aunque Benítez ya ha dejado claro que cuenta con él para la próxima temporada.
Minutos después se conoció la razón por la que el central no salió de nuevo al césped: se estaba tratando con los fisios del equipo después de sufrir un leve problema muscular al sumar el esfuerzo del partido a los duros entrenamientos de pretemporada.
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