El presidente filipino compara triunfo de Pacquiao con su lucha contra la criminalidad

El presidente filipino Rodrigo Duterte celebró este domingo la victoria de Manny Pacquiao ante el mexicano Jesse Vargas el sábado en Las Vegas, estableciendo un paralelismo con la controvertida lucha que mantiene para combatir la criminalidad en el país.

Gran estrella de Filipinas, Pacquiao, de 37 años, regresó al ring tras un periodo de retirada y recuperó su título del peso welter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) por tercera vez en su carrera.

Como de costumbre, la actuación de 'Pac-Man' fue seguida en todo el país, incluidos los centros comerciales y las plazas públicas.

"El coraje y las agallas mostradas por nuestro boxeador filipino en Las Vegas, son las cualidades que necesitamos para librar a la sociedad de la droga, de la criminalidad y de la corrupción", declaró el presidente filipino en un comunicado.

"El gobierno gestiona con éxito una guerra en estos frentes y como pueblo debemos continuar ganando puntos para lograr la victoria, al igual que la tenacidad ante todo de nuestro boxeador", añadió.

Pacquiao, elegido senador en mayo, respaldó públicamente la sangrienta política del nuevo presidente Duterte en la lucha contra la criminalidad.

Esta "guerra contra la droga", que ha causado más de 3.700 muertos en cuatro meses, ha sido condenada por varios países y organizaciones de defensa de los derechos humanos.

El nuevo presidente filipino prometió matar a decenas de miles de criminales con el objetivo de eliminar del país las drogas ilegales en seis meses.

Desde su investidura el 30 de junio, más de 3.700 personas murieron, la mayoría asesinados por civiles que siguieron la cruenta retórica del presidente animándolos a tomar la justicia por su mano.

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