La Paz, 1 sep.- El actual presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), Carlos Chávez, fue reelegido hoy para un tercer mandato hasta 2018, en un polémico congreso de dirigentes que terminaron realizando la votación en una plaza de la región amazónica de Beni (noreste).
Chávez, cuyas dos gestiones anteriores han sido muy criticadas por hinchas, algunos dirigentes y por el Gobierno del presidente Evo Morales, fue reelegido con 23 de 28 votos, en ausencia de los clubes Bolívar, Wilstermann, Oriente Petrolero, Universitario de Sucre y Sport Boys, reportaron los medios desde Trinidad, capital de Beni.
Además de Chávez, se postuló Carlos Ribera, del club Oriente Petrolero, mientras que la FBF rechazó las candidaturas del presidente del Bolívar, el millonario Marcelo Claure, y del titular del Sport Boys, Mario Cronembold.
La reunión se realizaba en el edificio de la cooperativa de teléfonos de Trinidad, cuando primero estalló cerca una granada de gas lacrimógeno, lanzada por un desconocido, sin que los dirigentes suspendieran el encuentro.
Minutos después, un grupo de policías, al mando del comandante departamental, coronel Guido Parada, interrumpió el congreso por una amenaza de bomba y pidió a los asistentes que desalojen el edificio por seguridad, para hacer una inspección.
Los agentes tuvieron que forzar el desalojo porque los dirigentes se negaron a suspender la reunión, que finalmente se reinstaló en una plaza cercana, donde se realizó la votación.
Chávez juró el cargo allí mismo y ratificó su "compromiso" con los dirigentes y "con el pueblo futbolero" para "conseguir recursos frescos para el fortalecimiento del fútbol boliviano".
En declaraciones a los medios, el presidente de la FBF protestó por la acción policial, que calificó de "atropello" y aseguró que se intentó boicotear la elección.
"No echo la culpa al Gobierno, porque sería yo un irresponsable. Lo que sí está visto de manera cruda, despiadada y vergonzosa es que hubo una orden de alguien superior para este atropello", sostuvo.
El coronel Parada señaló a la radio Patria Nueva que primero pidió "de buena forma" a los dirigentes que salgan del edificio ante la alerta de bomba, pero como éstos "se pusieron tercos", tuvo que pedir refuerzos para obligarles a abandonar la instalación.
El personal de Bomberos encontró en el lugar dos paquetes sospechosos y empezó a trabajar de inmediato para verificar si contenían o no explosivos.
La segunda reelección de Chávez en 2010 también se realizó en un polémico congreso, en medio de disputas entre los delegados y duras críticas del Gobierno de Morales, que varias veces se ha mostrado dispuesto a intervenir el fútbol boliviano.
Bolivia no clasifica a un Mundial desde su asistencia al realizado en Estados Unidos en 1994, al que llegó bajo la conducción del español Xabier Azkargorta, actual entrenador del Bolívar.
En las pasadas eliminatorias, la Verde concluyó en el penúltimo lugar con 12 puntos en 16 partidos.
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