Ros Casares se sacude presión y Rivas asegura que el final no está escrito

Redacción deportes, 31 mar.- El Ros Casares Valencia y el Rivas Ecópolis disputarán mañana la final de la Euroliga, la máxima competición del baloncesto femenino continental, una cita que el equipo valenciano afronta sacudiéndose la presión de ser favorito y el madrileño recordando que pese al diferente potencial no hay nada escrito.

"Estar en la final es un gran éxito para nosotras pero la historia no está escrita, este libro aún no se ha acabado y vamos a dar todo lo que tenemos, todo nuestro deseo, nuestras fuerza para alcanzar y espero que podamos alcanzar la victoria", señaló Esence Carter, jugadora del Rivas Ecóplis, en declaraciones a la web de la Federación Internacional.

El técnico del conjunto valenciano, Roberto Íñiguez, aseguró a la web de la Federación Española que deben sacudirse la presión y entender que en un partido como el de mañana no lo van a decidir cuestiones técnicas, físicas o tácticas exclusivamente.

"He dado el mismo mensaje en cada partido: que pensemos que tenemos una gran oportunidad, que hay que disfrutarla y que no nos metamos más presión de la que hay en un torneo así", subrayó el entrenador del equipo valenciano.

"Hay que disfrutar, sacar lo mejor de nosotros. Vamos a tener momentos malos y hay que tener corazón. En un partido así no sólo se juega al baloncesto, hay muchas más cosas, que el equipo está haciendo", añadió.

Miguel Martínez Méndez, el técnico del Rivas, recordó en declaraciones a la web de ambas federaciones, que han jugado "tres veces contra ellas y hemos perdido los tres partidos" pero aseguró que el encuentro de mañana "es otro partido".

"Hemos de recuperarnos e intentar ganar. Hemos jugado muy bien los tres partidos, con tácticas diferentes", señaló Méndez que reconoció la labor de todas sus jugadoras pero "especialmente nuestras bases que siempre han encontrado las mejores soluciones".

"Llegamos sin presión, con mucha tranquilidad, dando importancia al juego colectivo y utilizando mucho el pase y menos el bote", resumió el técnico del Riva.

Además, Amaya Valdemoro, jugadora del Rivas y ex jugadora del Ros Casares, recordó que "ha sido un año especialmente difícil para nosotros por las lesiones".

"Llegamos aquí relajadas y cada día te preguntas ¿este es mi equipo? Es increíble como estamos jugando. Estoy muy orgullosa, especialmente por las más jóvenes", destacó Valdemoro, que auguró que en el encuentro de mañana "vamos a dar una gran batalla".