Sevilla 1-4 Barça: 'contra - golpe' a la Liga

Siete días y un 'pinchazo' del Atlético de Madrid, eso es lo que ha necesitado el Barcelona para recuperar el liderato de la Liga y recuperar la confianza en su juego, que ahora se basa en el contragolpe, como el que le ha dado a una Liga que es´ta más emocionante que nunca. Cuando encontró espacios en la defensa del Sevilla vio la luz, por que el 'tiqui-taca' ya no funciona como antaño.

El Barcelona adolecia desde el inicio de los mismos síntomas que en las últimas semanas: ritmo lento y pasotismo generalizado de los jugadores, que se veían superados por la intensidad del Sevilla desde el inicio del partido, que salió a 'morder' conocedor del nerviosismo que podía meter en el cuerpo a los azulgranas.

Y en la primera ocasión acertó Alberto Moreno. El lateral zurdo se asomó en ataque y aprovechó una jugada individual de Rakitic para -con la colaboración de Batra- superar a Valdés. El semblante de los jugadores del Barça era de incredulidad total. No entendían lo que estaba pasando en el terreno de juego.

Los azulgranas sufrían el chaparrón de agua que caía sobre el Sánchez Pizjuán y el que le estaba cayendo del equipo rival, que no le permitía salir de su propio campo. El palo evitó el segundo de los locales tras un cabezazo picado de Bacca. Cada vez que Rakitic colgaba un balón al área, Martino temblaba y la defensa 'rezaba'. Entre tanto, Valdés evitaba el segundo gol tras un cabezazo que el portero sacó con los pies. Pero esa escena ya forma parte de otra 'película'.

Porque por entonces Iniesta había decidido echarse al quipo y porque dos minutos antes Alexis remató con la cabeza al fondo de las mallas una falta botada por Messi. El chileno estaba en posición adelantada, pero el colegiado no lo señaló fuera de juego. La pegada de los grandes, la pegada de los que -casi- siempre ganan.

El Barcelona metió una marcha más y solo necesitó un par de jugadas en ataque para darle la vuelta al partido. Pedro llegó por el pico izquierdo del área aprovechando la debilidad defensiva del Sevilla y asistió a Messi, que no dudó, levantó el balón con un toque sútil para que el balón no se frenara en un charco y sin dejarlo botar remató con el empeine exterior de la zurda. Golazo. Junto al palo y haciendo inservible la estirada de Beto.

El análisis al descanso era complicado. El Sevilla había hecho casi todo bien e iba perdiendo. El Barça casi todo mal e iba ganando. Los de Emery salieron en la segunda mitad con aires renovados y los azulgranas que lo sabían, esperaban cerca de su área para salir al contraataque.El Barça disfruta con espacios

Primero Vitolo, que disparó cruzado en un mano a mano y después Gameiro, al que Valdés le hizo un paradón a bocajarro, perdonaron el empate. La historia de la primera mitad se repetía, pero en este caso la angustia de Martino iba a durar menos. La defensa del Sevilla tendió una 'alfombra roja' a los delanteros del Barcelona, que encontraron muchos espacios.

A falta de media hora para el final, Messi recogió un balón de Iniesta en la frontal y lo puso donde quiso. Es decir, en el fondo de las mallas tras 'besar' el palo. Beto de nuevo, nada pudo hacer y el Barça del contraataque volvía a 'oler' a equipo líder de la Liga. Ya van 13 goles a la contra, más que ningún otro equipo.

Emery metió a Trochowski, Cheryshev y Jairo, y los locales no terminaban de renunciar al ataque. Precisamente el ruso se plantó ante Valdés, pero no supo definir ante Valdés. El que perdona la paga y quien se la cobró fue Cesc, que finalizó con un toque sutil sobre Beto otra jugada rápida del Barça.

Los de Martino se recuperan, no futbolísticamente, pero si mentalmente con esta victoria con la que recupera el liderato una semana después de perderlo. Las sensaciones no son buenas, el 'Tata' tiene trabajo por delante.