Sevilla - Real Madrid: goles, botellazo, polémica… y también fútbol

  • El duelo entre Sevilla y Real Madrid prometía ser intenso y disputado, entre dos equipos que se tienen ganas desde hace tiempo y que se jugaban el acceso a la final de la Copa del Rey. Por si no hubiera suficientes alicientes, la campaña que preparó el equipo hispalense para convocar a sus aficionados, terminó de 'calentar' el choque. A la hora de la verdad, cuando el árbitro pitó el inicio, el encuentro no decepcionó.
Sevilla v Real Madrid - Copa del Rey
Sevilla v Real Madrid - Copa del Rey
Aitor Amorós
Aitor Amorós

Tuvo de todo la ida de semifinales de Copa que acogió el Sánchez Pizjuán: polémica, dureza, acciones deleznables,… y también fútbol, porque fue un buen partido de fútbol.

Benzema, el protagonista eclipsado.

El francés tenía ante sí la posibilidad de reivindicarse ante su entrenador, su club y sus aficionados tras la contratación de Adebayor como madridista. Y la aprovechó, porque el gran gol que anotó, recordando a aquel Benzema que enamoró y deslumbró a Europa en el Olympique de Lyon, sirvió a los merengues para llevarse el encuentro y encarrilar la eliminatoria, a falta de la vuelta en el Santiago Bernabéu.

Pero todo parece que está en contra del ariete galo. Estaba destinado a ocupar todas las portadas y los titulares, pero el partido deparó muchas sorpresas (gol fantasma, botellazo a Casillas,…), y la gran actuación de Benzema quedó en un segundo plano. Injusto, porque si el Real Madrid alcanza la final, será en gran medida por la buena actuación de delantero, al que Mourinho pidió que espabilara y parece que le ha hecho caso al ver las orejas del lobo (Adebayor).

El gol fantasma.

Agonizaba el primer tiempo cuando se produjo la jugada de la que se va a hablar en toda España los próximos días, hasta que se resuelvan las semifinales de Copa. Luis Fabiano se plantó solo ante Casillas con el balón controlado, regateó al portero madridista con un autopase hacia su derecha, y remató a puerta. El estadio empezaba a cantar el gol, pues veían el balón dentro, pero apareció Albiol, quien evitó en primera instancia que el esférico entrara limpio, y desde dentro de la portería, sentado en el suelo, con los dos pies, empujó el esférico cuando estaba a punto de cruzar la línea de meta. Undiano Mallenco no concedió el tanto, y el Sevilla se quedó con la miel en los labios.

Así terminó la primera mitad, con los madridistas felicitando al central valenciano, y lo sevillistas protestando al árbitro por no haber concedido el tanto. La regla explica claramente que el balón tiene que traspasar "completamente la línea de meta entre los postes y por debajo del travesaño",  pero tras ver las tomas de televisión, no se puede asegurar que lo traspasara. ¿O sí? Vota en nuestra encuesta. El protagonista de la acción, Albiol, afirmó tras el partido que sacó el esférico "sobre la línea", mientras que Del Nido no dudó: "El línea se ha equivocado".

Feo final: un objeto impactó en Casillas.

El espectacular ambiente que hubo en el estadio sevillista, con un público que empujó a su equipo durante los 90 minutos del partido, será tristemente recordado por un impresentable que no sabe disfrutar del fútbol.

Con el final del partido, desde el fondo que en el que Real Madrid defendía su portería volaron dos objetos con el objetivo de impactar en Casillas. El primero no lo logró, pero el segundo sí que colisionó en la cabeza del guardameta, que cayó sobre el césped doliéndose. Dos recogepelotas del club andaluz saltaron raudos a recoger los "elementos" lanzados y devolverlos a la grada, donde el árbitro no pudiera identificarlos. Granero y Karanka de percataron de lo sucedido e increparon a los dos chavales, mientras el capitán blanco y de la Selección se recuperaba del impacto.

La intensidad se mezcló con la dureza.

Undiano Mallenco tuvo un difícil trabajo con el duelo entre Sevilla y Real Madrid. En los últimos tiempos siempre han deparado choques intensos, y en esta ocasión no iba a ser menos, con una final de Copa en juego y el ambiente caliente por la campaña del club hispalense. Ambos equipos se emplearon a fondo, y la intensidad que mostraron en todas las acciones provocaron choques, faltas, y pequeñas trifulcas.

En total, el árbitro mostró nueva cartulinas amarillas: cinco para los madridistas (Lass, Khedira, Sergio Ramos, Ronaldo y Arbeloa), y cuatro para los andaluces (Luis Fabiano, Zokora, Alexis y Fernando Navarro). Jugadores como Lass o Luis Fabiano estuvieron cerca de ser expulsados, ya que con una tarjeta a sus espaldas siguieron entrando en la pelea, no rehuyeron la disputa.

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