Suprimen dos tramos de adoquines de la quinta etapa a causa de la lluvia

  • Dos de los nueve tramos de adoquines que tenían previsto acometer hoy los ciclistas en la quinta etapa del Tour de Francia han sido suprimidos "por motivos de seguridad" a causa de la lluvia, informó la organización.

Arenberg (Francia), 8 jul.- Dos de los nueve tramos de adoquines que tenían previsto acometer hoy los ciclistas en la quinta etapa del Tour de Francia han sido suprimidos "por motivos de seguridad" a causa de la lluvia, informó la organización.

Los ciclistas deberán atravesar otros siete kilómetros de "pavés" en la etapa entre la ciudad belga de Ypres y la francesa de Arenberg, que, en total, suman 14 kilómetros, en lugar de los 15,4 previstos inicialmente.

La etapa, que afronta tramos adoquinados prestados por la París-Roubaix pero en sentido inverso, queda en 152,5 kilómetros.

Los directores de la carrera reconocieron hoy los tramos adoquinados ante la intensa lluvia que cae en la frontera franco-belga y decidieron tomar esta decisión "por motivos de seguridad".

Los tramos suprimidos son el séptimo, conocido como Mons-en-Pévèle, que tenía un kilómetro y que iba a afrontarse a 45,5 kilómetros de la meta, y el de Orchies, en la localidad de Beuvry-la-Forêt, de 1,4 kilómetros, a 30 de la llegada en Arenberg.

El director de la carrera, Thierry Gouvenou, hizo parte del recorrido junto con su antecesor, Jean-François Pescheux, actualmente al cargo de la París-Roubaix.

El primero de los tramos, indicaron, fue suspendido por que es el más irregular y, por tanto, más peligroso para los ciclistas.

En el caso del segundo, que lleva el nombre de Marc Madiot, ganador de la Roubaix en 1985 y 1991 y actual responsable del equipo FDJ.fr, la suspensión se debe a que el tramo se encuentra rodeado de árboles y las hojas caídas le hacen demasiado resbaladizo con la lluvia, agregaron.

Quedan otros siete tramos adoquinados que, con la lluvia, pueden ser muy selectivos en la jornada.

El primero de ellos, situado a 68,5 kilómetros del final, está en el famoso Carrefour de l'Arbre, con 1,1 kilómetros.

Le siguen el de Ennevelin de Pont-Thibault, con 1,4 kilómetros y a 52 de la meta; el de Bersée, de la misma distancia, a 41 del final; el de Sars-et-Rosières, de 2,4 kilómetros, a 24,5 de la meta; el de Brillon en Warlaing, de 1,4 kilómetros a 20,5; el de Wandignies-Hamage de Hornaing, el más largo con 3,7 kilómetros a 15,5 de la meta; y el de Hélesmes, en Wallers, de 1,6 kilómetros, situado a 6,5 del final.

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