Thiago Pereira vive "más que un sueño" con su plata en los 400 estilos

Londres, 28 jul.- La medalla de plata conseguida por el brasileño Thiago Pereira (1986, Volta Redonda, Río de Janeiro) es "más que un sueño", especialmente porque en los 400 estilos se ha medido con los estadounidenses Ryan Lochte y Michael Phelps, lo que le da más valor a su logro.

Pereira fue segundo por detrás de Lochte y por delante del japonés Kosuke Hagino. Michael Phelps, en el inicio de su retirada, finalizó cuarto y faltó al podio por primera vez en unos Juegos desde Sydney 2000.

"Estoy muy contento, muy satisfecho con el resultado y sorprendido por el tiempo conseguido", ha comentado Pereira, quien ha desvelado que después del Mundial de Shanghái, del año pasado, se había planteado hacer una pausa para cambiar su preparación.

"Ahora esta medalla lo compensa todo, me alegro de haber tenido tanta paciencia", ha comentado el nadador de Río de Janeiro, quien se dio a conocer en los Juegos Panamericanos disputadas en su ciudad en 2007 batió el récord de cinco medallas de oro en esta competición, hasta entonces en poder del mítico Mark Spitz.

Pereira ha admitido que no estaba en su cabeza conseguir una medalla y que le ha hecho especial ilusión poderla conseguir en una carrera en la que los favoritos eran Ryan Lochte, Michael Phelps o el húngaro Laszlo Cseh, quien no se ha clasificado ni para la final.

"Me ha encantado nadar con Phelps y Lochte y lo mejor es que he podido ganar una medalla en una carrera en la competían los dos. He dado lo mejor de mi mismo y estoy muy feliz", ha recordado.

Thiago Pereira ha explicado que ha sentido una enorme emoción con lo conseguido, pero que rápidamente tiene que concentrarse en su prueba: los 200 estilos.

Ha admitido que después del último Mundial, pensó en darle un giro a su carrera. "Volví a entrenarme más fuerte, con viajes continuados entre Brasil y Estados Unidos y me ha ido muy bien porque he podido estar en contacto con grandes nadadores y entrenarme con ellos", ha explicado.

Tras recibir la medalla de plata, el brasileño ha comentado que estuvo a punto de llorar. "Me pasó por la cabeza todo lo vivido en los Juegos -fue quinto en Atenas y cuarto en Pekín-", ha recordado.