Tú a Bucarest y yo a Barcelona

Javier Villanueva

Madrid, 7 may.- Como en el clásico infantil de la factoría Disney, la afición del Atlético de Madrid tendrá esta semana los ojos puestos en dos ciudades distintas, Bucarest, donde el miércoles el equipo de fútbol disputará la final de la Liga Europa, y Barcelona, donde el sábado el de balonmano se jugará en el Palau Blaugrana el título de Liga.

Cuatro días en los que el club rojiblanco confía en poder engrosar sus vitrinas, en las que ya relucen los trofeos de la Copa del Rey y de la Supercopa de España, que el conjunto de balonmano ya ha conquistado en su retorno a las canchas.

Un espíritu ganador que el capitán, José Javier Hombrados, y el técnico, Talant Dujshebaev, del equipo de balonmano han querido transmitir a la plantilla de Diego Pablo Simeone con su visita al Cerro del Espino, donde los madrileños se ejercitaron por última vez antes de poner rumbo esta tarde a la capital rumana.

"Sobre todo les he dicho que disfruten, que se lo tomen como un premio, porque no se juega una final todos los días", señaló Hombrados, tras dialogar con los futbolistas atléticos.

Una amigable charla en la que Hombrados y Dujshebaev saludaron a los jugadores y el cuerpo técnico de la primera plantilla rojiblanca, así como al director deportivo, José Luis Pérez Caminero, y Carlos Aguilera, responsable del fútbol base del Atlético.

"Como todos los aficionados viviré la final con muchos nervios, aunque esperemos que el fútbol y el balonmano podamos celebrar el domingo una semana de alegría completa para los atléticos", indicó Hombrados, un habitual, siempre que sus compromisos deportivos se los permiten, del Vicente Calderón.

Especialmente distendida fue la conversación entre el guardameta José Javier Hombrados y su homólogo futbolística, el joven belga Thibaut Courtois, que espera poder animar en directo al equipo de balonmano en la Final a Cuatro de la Liga de Campeones que se disputará a finales de mayo en la ciudad alemana de Colonia.

Y es que el de Bucarest, no será el único título por el que peleará esta campaña el Atlético de Madrid, que espera saldar los próximos días 26 y 27 de mayo la "deuda" que la Copa de Europa tiene desde hace veintisiete años con los rojiblancos, tras caer en 1985 en la final ante la Metaloplastika.

"Ganar la Liga de Campeones con la rojiblanca sería un sueño. Sería devolver a este club, tras este apagón de veinte años, parte de su historia. Creo que los atléticos nos lo merecemos y vamos a ver si podemos conseguirlo", comentó Hombrados.

Una final a la que el portero rojiblanco confía en llegar con el título liguero casi en la mano, un objetivo nada sencillo, como reconoció el propio Hombrados, ya que para ello deberán ganar el próximo sábado al Barcelona Intersport, líder invicto de la competición, por al menos tres goles.

"Para ganar al Barcelona tenemos que hacerlo muy bien. Debemos estar muy bien en todas las facetas del juego", comentó un Hombrados, que sueña antes con ver levantar el próximo miércoles a Antonio López en Bucarest una Liga Europa, que afronta cargado de "buenas sensaciones" tras su visita al Cerro del Espino.