Una goleada a Venezuela que da a Bolivia un respiro a tanta crisis

  • Con una victoria por 4-2 sobre Venezuela, su primer triunfo en las clasificatorias sudamericanas para el Mundial de Rusia-2018, Bolivia toma una bocanada de aire fresco en la altura de La Paz, un bálsamo para la aguda crisis que atraviesa el fútbol de este país.

Este soplo de aire fue vital en momentos en que Bolivia parecía tocar fondo con dos derrotas al hilo en las primeras fechas del premundial, en octubre, por 2-0 de local ante Uruguay y por igual marcador de visita a Ecuador.

Con un fútbol más ordenado y mayor juego de conjunto, Bolivia logró una ansiada victoria en el momento preciso.

"Hemos sumado tres puntos que dan oxígeno para seguir adelante. Todavía estamos vivos, no nos den por muertos, vamos a seguir luchando", celebró, conmovido después de la goleada, el seleccionador boliviano, Julio César Baldivieso.

La verde volvió a ganar en su patio después de tres años de sequía en eliminatorias. Basta decir que Venezuela le hizo la vida imposible en los últimos dos partidos en el estadio Hernando Siles: para la cita de Brasil-2014 empataron 1-1 y para Sudáfrica-2010 la vinotinto ganó 1-0.

Después de su inédita clasificación al Mundial de Estados Unidos-1994, Bolivia registró un bajón futbolístico enorme, a la par de una aguda crisis dirigencial.

Con una buena actuación ante Venezuela, signo alentador de recuperación, la verde parece haber hallado un destello de luz al final del túnel. Y también en el joven Rodrigo Ramallo al remplazante ideal de Marcelo Martins Moreno, su antiguo goleador que renunció a la selección opuesto al DT Baldivieso.

Mezcla de experiencia y juventud, en el equipo de Baldivieso "hay una enorme renovación" y, por ello, "vamos a seguir apoyando (...), que tenga el grupo esta confianza del pueblo como también de sus autoridades", celebró el presidente Evo Morales, un apasionado futbolista aficionado.

Con dos goles al hilo, Ramallo, 25 años, que superó una lesión a contrarreloj, asomó como el goleador que Bolivia espera. Rodrigo es hijo de William Ramallo, goleador, con 7 tantos, en las eliminatorias para el Mundial de EEUU-1994.

El primer triunfo boliviano "nos da oxígeno para seguir viviendo", explicó el 'Emperador' Baldivieso, que cree, sin embargo, que "nos falta trabajo" y tiempo para seguir entrenando.

"Lo único que he prometido es trabajo, no acostumbro prometer ni títulos ni la clasificación a la Copa del Mundo, (aunque) me gustaría ver a la verde disputar un Mundial, pero hay que ir paso a paso, y el próximo paso inmediato es Paraguay", sostuvo.

La era Baldivieso cuenta con un importante respaldo popular, debido aparentemente a que 'Baldi' era un ídolo en su época de jugador. Sin embargo, esta selección está amenazada fuertemente a causa de una irresuelta crisis dirigencial.

La crisis boliviana no es sin embargo nueva, es recurrente y, peor, aparentemente congénita.

El club Bolívar, el más laureado del fútbol nacional, propuso en 2013 eliminar el carácter tricéfalo de la dirección del fútbol boliviano.

La coexistencia de tres direcciones: una Federación, encargada de las selecciones nacionales, una Liga, que organiza los torneos de primera división, y una Asociación, para divisiones menores, está matando al fútbol boliviano.

La situación se complicó más con la detención en julio pasado de Carlos Chávez, tesorero de Conmebol, expresidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), actualmente en la cárcel por una investigación de corrupción.

Ante esa emergencia, los clubes eligieron a una dirección transitoria en la FBF que la Conmebol se niega a reconocer.

El exportero paraguayo José Luis Chilavert dijo recientemente que Chávez "era el cerebro de la distribución de los dineros de las coimas y del dinero de la Conmebol".

rb/ma

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