Una huelga de metro amenaza con colapsar el acceso a Stamford Bridge

Londres, 28 abr.- La huelga del metro de Londres que comenzará esta noche y se alargará hasta el jueves amenaza con colapsar los accesos a Stamford Brdige antes y después del duelo entre el Chelsea y el Atlético de Madrid, del miércoles, en la vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones.

Los servicios mínimos planificados garantizan únicamente cinco trenes a la hora en la parada de metro más cercana al estadio del Chelsea, Fulham Broadway, lo que se prevé insuficiente para garantizar el transporte a los cerca de 42.000 aficionados que asistirán al partido.

En un comunicado, el club de Londres ha recomendado que se utilicen medios alternativos al metro, dado que se prevé que todas las líneas del suburbano de Londres mantengan un servicio "muy limitado".

La primera recomendación de transporte que traslada el club a los aficionados es que caminen a la estación de Clapham Junction, a unos 45 minutos a pie, al sur del Támesis, donde podrán tomar trenes de cercanías hacia el centro de la ciudad.

También recomienda caminar unos 40 minutos hasta la estación de autobuses de Hammersmith, donde comienzan y acaban diversas líneas que unen el oeste de Londres con el centro de la capital británica.

El club recuerda que el Overground, un servicio suburbano alternativo al metro, no estará en huelga, si bien subraya que la estación de Imperial Wharf, a 15 minutos del estadio "estará extremadamente llena, en particular antes y después del partido" y "quizás cierre temporalmente durante algunos periodos para evitar aglomeraciones".

El Atlético de Madrid vendió a sus socios la semana pasada las 2.500 entradas asignadas por la UEFA, si bien se espera que más aficionados españoles hayan comprado pases para asistir al partido europeo del miércoles.

Los trabajadores del metro de londres iniciarán esta noche el paro en protesta por el cierre de 260 oficinas de venta de billetes el próximo año, un plan por el que se suprimirán 950 puestos de trabajo.

La capital británica prácticamente se paraliza cuando se produce una huelga de metro, el principal medio de transporte para los ocho millones de habitantes de Londres.