Río de Janeiro, 30 jun.- Una protesta en el césped del Maracaná empañó hoy brevemente la ceremonia de clausura de la Copa Confederaciones, antes del partido entre Brasil y España.
Dos figurantes, disfrazados de balones, se saltaron el protocolo, salieron de la formación y desplegaron una pancarta, cuyo mensaje fue legible en algunas partes del estadio, antes de ser retirados del césped por responsables de seguridad.
La pancarta pedía la "inmediata anulación de la privatización del Maracaná", en alusión a la concesión de la gestión del estadio a una empresa privada, realizada el pasado mayo.
Otro de los voluntarios levantó una bandera arcoiris con leyendas contra la homofobia, según fotografías divulgadas por medios locales.
Fuera del estadio había dos manifestaciones convocadas contra la organización de la Copa Confederaciones y del Mundial de 2014.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios