En mayo de 2013, Jamie Vardy y Harry Kane protagonizaron una fotografía para la historia. Los dos delanteros de la actual selección inglesa estaban en el banquillo del Leicester, en la semifinal del play-off de la segunda división en una eliminatoria que su equipo perdió contra el Watford. Tres años más tarde, esos dos suplentes son los dos máximos goleadores de la Premier League y la esperanza de Inglaterra en la Eurocopa.
"He visto la foto, ¿no es una locura?", dijo vardy. "Menuda diferencia comparado con hace unos años. Todos los días, cuando tengo un tiempo solo, pienso en el camino que he recorrido", explica el delantero del Leicester, que suma 19 goles aupando a su equipo al primer puesto de la clasificación.
Vardy persigue a Harry Kane, goleador del Tottenham con 21 tantos, único equipo que sigue de cerca al Leicester en la carrera por el título tan solo cinco puntos por debajo.
Ambos fueron decisivos en la remontada de Inglaterra ante Alemania el pasado sábado por 3-2. Vardy marcó un golazo de tacón y Kane emuló a Cruyff dejando atrás a dos defensas y batiendo a Manuel Neuer.
El crecimiento de Vardy y Kane ha renovado las esperanzas de Inglaterra de cara a la Eurocopa. El país donde nació el fútbol vuelve a creer en un título muchos años después.
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