El régimen sirio y los principales grupos rebeldes han firmado un acuerdo para suspender los ataques e intentar retomar las conversaciones de paz. Esta iniciativa ha sido impulsada por Rusia y Turquía, que actuarán también como vigilantes de los compromisos adquiridos.
Al Assad ha reiterado ante Putin que sus fuerzas "cumplirán" dichos acuerdos, al tiempo que ha elogiado el papel de Moscú y Ankara durante estas últimas semanas.
El dirigente sirio también confía en que el diálogo que se ha organizado en la capital de Kazajistán sea "un paso importante" para solucionar de forma "definitiva" la guerra iniciada en marzo de 2011.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios