Saná, 9 sep.- El líder del movimiento chií de los hutíes, Abdel Malek al Hutí, ha amenazado a las autoridades del Yemen con recurrir a "opciones estratégicas" en caso de que no respondan a sus exigencias de restaurar los subsidios a los combustibles y destituir al Gobierno.
"Si vemos que se mantienen inflexibles y rechazan las demandas de este pueblo, la situación se complicará aún más, pues nosotros adoptaremos opciones estratégicas importantes", afirmó anoche en un discurso televisado.
Al Huti agregó que esas "opciones" no solo incumben a Saná y otras posiciones aisladas, sino que son "importantes asuntos estratégicos que se tomarán junto la escalada revolucionaria".
Sin entrar en detalles sobre esos planes, el dirigente chií expresó su esperanza de que su grupo no tenga que llegar a ese extremo.
Asimismo, Al Huti criticó al presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, por su apuesta por el respaldo de EEUU, que consideró "equivocada".
Los hutíes iniciaron el mes pasado una serie de protestas para exigir la renuncia del Ejecutivo, principalmente en la capital, que está rodeada por milicianos armados del movimiento.
Ayer, el comandante de las Fuerzas Especiales de Seguridad del Yemen, general Fadl al Kusi, fue destituido a raíz de los enfrentamientos entre la Policía y los partidarios del movimiento chií en Saná, y el fracaso de los primeros en desmantelar una inmensa acampada.
Además, la aviación militar yemení bombardeó cuatro veces posiciones de los combatientes hutíes en las comarcas de Al Gil y Al Matma, en la provincia septentrional de Al Yuf.
Los hutíes, que se alzaron en armas en 2004 dirigidos por Husein al Huti, padre del actual líder, controlan desde 2010 la provincia septentrional de Saada y tratan desde hace meses de ampliar las zonas bajo su dominio.
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