Soylu ha añadido en el balance semanal que se han rendido diez miembros del PKK y que las fuerzas de seguridad se incautaron de un dron, 16 armas, 470 kilos de sustancia explosiva, nueve granadas de mano y munición, además de destruir nueve zulos del grupo armado, según ha recogido la agencia de noticias oficial del país, Anatolia.
Además, La Policía detuvo a otras 285 personas por sus supuestas relaciones con organizaciones terroristas.
En esta misma línea, un comunicado de la administración de Hakkari reveló el pasado miércoles que cuatro terroristas del PKK habían muerto a causa de un ataque aéreo con dron cerca de la región de Kirikdag.
El sábado pasado el Gobierno de Turquía informó de que en agosto sus tropas habían matado a un total de 176 miembros del PKK, mientras que habían muerto trece miembros de las fuerzas de seguridad y seis civiles en ataques del grupo kurdo. Además, fueron detenidos en agosto 548 sospechosos por su presunta relación con el PKK y 138 de ellos aún continúan bajo custodia de las autoridades.
El Ejército turco ha intensificado sus operaciones contra la guerrilla kurda tanto en el país como en el norte de Irak desde que quedó roto el alto el fuego entre el Gobierno y el PKK en julio de 2015.
A partir de entonces se han reanudado los enfrentamientos, combates y ataques, en una región ya marcada por la violencia de la guerra de Siria y las acciones del grupo terrorista Estado Islámico en este país y en Irak. Más de 40.000 personas, en su mayoría kurdos, han muerto desde que el PKK se alzó en armas contra las fuerzas gubernamentales turcas en 1984.
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