Esta desinversión impulsó además la estrategia de reducción de deuda del grupo que preside Florentino Pérez, que logró recortar su pasivo a más de la mitad (un 53,7%) el pasado año, hasta situarlo en 1.214 millones de euros.
En el plano operativo, ACS redujo un 4% sus ingresos el pasado año, hasta los 31.975 millones de euros, por los efectos de la reestructuración en su filial australiana Cimic y la caída del negocio en España. El beneficio bruto de explotación (Ebitda) también se contrajo, un 5,5%, hasta los 2.023 millones.
La compañía de construcción, servicios y concesiones logró en el exterior el 86,6% del total de sus ingresos del pasado año. Norteamérica genera casi la mitad de su facturación (un 46%), mientras que España sólo representa el 13,4% de su negocio.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios