El jefe de grupo de inspectores del Banco de España, Pedro Comín, y el director del departamento en el momento de la salida a Bolsa de Bankia, Pedro González, han afirmado que los correos del grupo de inspección que alertaban de una "inviabilidad" del grupo BFA-Bankia son "opiniones a futuro" y han admitido que no fueron remitidos al entonces gobernador del organismo de supervisión, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, ni a su 'número dos', Francisco Javier Aríztegui Yáñez.
Así lo han asegurado los dos exdirectivos del Banco de España ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, ante quien han declarado como investigados en el 'caso Bankia', según han informado fuentes jurídicas a Europa Press.
Según han afirmado, ninguno compartía el contenido de estos correos, aportados a la causa por el inspector José Antonio Casaus, que advertían reiteradamente "de la inviabilidad del grupo y de que la solución de salida a Bolsa no debía ser aprobada, pues suponía grave perjuicio para accionistas, preferentistas y contribuyentes (estimado en unos 15.000 millones de euros)".
Para ambos eran "opiniones a futuro", ya que ofrecían una visión financiera y no cuestionaban las cuentas aprobadas hasta marzo de 2011, que fueron las que se tuvieron en consideración para la operación bursátil.
Comín ha apostillado que los correos de Casaus eran "precipitados" y no estaban "suficientemente pensados", pues en ellos se manifestaban errores, como por ejemplo los márgenes de la explotación. Según han dicho las mismas fuentes jurídicas, Casaus exponía que Bankia era "inviable" porque no generaba beneficios y, a juicio de Comín, este "se equivoca".
En este sentido, Comín ha afirmado que a él sí le llegaron estos mensajes, que posteriormente analizó, pero no se los reenvió a nadie de la cúpula del Banco de España. "Aríztegui no recibió el correo", ha dicho, al tiempo que ha concretado que los debatió "ad nauseam" con su director de departamento, Pedro González.
INFORME OFICIAL APORTADO A LA CAUSA
Comín ha aportado a la causa un informe oficial que elabora teniendo en cuenta los correos de Casaus que, en su opinión, son interpretaciones de una situación. De hecho, ha solicitado que los mensajes sean vistos y estudiados en el mismo contexto que los informes de seguimiento también adheridos al procedimiento.
También ha recalcado que los correos son una valoración que le pidió a Casaus como subordinado sobre la situación y que por ello no los elevó a sus superiores, ya que eran menos rigurosos que los informes de seguimiento que redactó el mismo Casaus y que no señalan la supuesta inviabilidad de BFA-Bankia, según han informado otras fuentes presentes en la declaración.
Por su parte, González ha defendido esta misma línea --según ha precisado, ha visto los mensajes unos días antes de su comparecencia-- y ha dicho que sí que hablaron de los aspectos relevantes que en ellos se señalaban. De hecho, ha enfatizado ante el juez que no le sorprendió el contenido de los mismos porque conocía de antemano la "opinión" de Casaus sobre la situación del BFA-Bankia y su salida a Bolsa.
Aunque también ha asegurado que las cartas no fueron enviadas a la cúpula del Banco de España, ha afirmado que está convencido de que la visión del equipo de inspección llegó a sus superiores y que el exsubgobernador Francisco Javier Aríztegui --con el que ha reconocido tener una relación más fluida-- y el gobernador Miguel Ángel Fernández Ordóñez --más pendientes de otras cuestiones, ha apuntado-- estaban al tanto.
EL BANCO DE ESPAÑA EVITÓ QUE SE PAGARAN 180 MILLONES EN BONUS
En uno de estos correos, se cuestionaba la "honradez" de los gestores por querer cobrar un bonus cuatrienal en 2009 a pesar de las debilidades por las que estaba pasando la entidad financiera. Ante esto, González ha señalado que, a pesar de que no había una norma clara para prohibirlos, el Banco de España consiguió que no se incluyera ese pago y ahorrar así 180 millones de euros.
Por otro lado, ambos investigados en la salida a Bolsa de Bankia han ratificado su declaración como testigos en julio de 2016 en el que señalaron que la entidad contaban con provisiones suficientes para su debut bursátil, tal y como afirmó la empresa auditora Deloitte. En esta línea, Comín ha indicado que a pesar de todos los ajustes que tuvo que hacer la entidad financiera contaba con una "cómoda situación financiera".
Comín y González, junto al exdirector general de Supervisión Mariano Herrera García-Canturri --que declarará mañana también como investigado--, dimitieron de sus cargos el pasado 13 de febrero tras conocer la decisión de la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional de obligar a Andreu a llamarles a declarar.
ANDREU RECHAZÓ CITARLES EN VARIAS OCASIONES
El juez del 'caso Bankia' rechazó en varias ocasiones citar como investigados a los responsables del Banco de España y de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en el momento de la salida a Bolsa de Bankia, pero se vio obligado a hacerlo cuando la Sala estimó parte del último recurso presentado por la acusación popular en representación de la Confederación Intersindical de Crédito (CIC), en la que pedía su imputación al conocerse la existencia de las advertencias de inviabilidad.
La última fue el pasado 28 de noviembre, pese a que la Sección Tercera dio por buena la tesis de los recurrentes sobre el hecho de que la jefatura del Banco de España tuvieron "noticias directas y fehacientes" de la inviabilidad del grupo y de la "inidoneidad de su salida a bolsa en la modalidad de doble banco consta indiciariamente acreditado en las diligencias", que se conoció a través de la testifical de Casaus, el pasado 5 de septiembre, que el tribunal calificó de "contundente".
Mañana es el turno de declaración Herrera García-Canturri y el exdirector general de Supervisión Jerónimo Martínez Tello; mientras que el jueves lo harán Aríztegui y Fernández Ordóñez.
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