En el caso de la miel cántabra, el Ejecutivo comunitario reconoce su Apelación de Origen Protegida (AOP), que implica que tanto la producción como la transformación y la elaboración del producto han tenido lugar en el área geográfica a la que se refiere la denominación.
En cuanto a la Ternera de los Pirineos Catalanes, Bruselas ha registrado tanto su número en castellano como en catalán (Vedella dels Pirineus Catalans) como en francés (Vedell des Pyrénées catalenes) y reconoce su Indicación Geográfica Protegida (IGP), que supone que al menos uno de los estadios de producción del producto (transformación y elaboración) ha tenido lugar en el área a la que se refiere a denominación.
En total, el registro comunitario de Denominaciones de Origen suma más de 1.300 productos protegidos para cuidar sus lugares geográficas, denominaciones de origen y productos de especialidad tradicional de la Unión Europea.
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