Cámara de Cuentas recomienda a Faisem homogeneizar los procedimientos de gestión y registro de aportaciones de usuarios

Así lo señala tras constatar que en algunas provincias se formalizan nuevos contratos con los usuarios anualmente, mientras en otras se consideran prorrogados automáticamente de forma indefinida. También ha detectado que el coste reflejado en algunos contratos no se corresponde con las tarifas aprobadas y vigentes, "siendo inferiores sin que exista justificación, etc".

Además, ha constatado que no existen procedimientos unificados para el control de las cuotas o aportaciones de los usuarios y que la información que aportan las delegaciones no es homogénea.

El ente fiscalizador también ha señalado que Faisem contabiliza en 2014 como subvenciones 4.785.920 euros que provienen de los convenios de colaboración con Assda para la concertación de 441 plazas de Estancia Diurna, Atención Especializada y del programa de Respiro Familiar, en los centros que gestiona la Fundación. Si bien, apunta que "la naturaleza y concesión de estos ingresos no tiene carácter subvencional, por lo que se propone su reclasificación como ingresos de la actividad propia de la entidad".

Por otra parte, llama la atención sobre un gasto excepcional de 89.998 euros al incurrir en "un supuesto de responsabilidad solidaria", pero "no consta en la memoria de las cuentas anuales información sobre la citada contingencia".

El informe también incluye observaciones de interés como que Faisem mantiene en su contabilidad unos derechos pendientes de cobro derivados de unos créditos comprometidos por el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) para una transferencia de financiación de explotación en 2014, por 1.150.000 euros, cuando las agencias de régimen especial no tienen competencia para tramitar este instrumento de financiación. "A la fecha de finalización de los trabajos de campo, la Junta de Andalucía no ha procedido a resolver esta situación", subraya.

Además, la Cámara de cuenta destaca que el organigrama de 2014 incluye cinco directivos, "cuyos puestos de trabajo no están determinados en los estatutos".

Por último, el ente fiscalizador ha indicado que, aunque la Ley de Dependencia incorpora la enfermedad mental como causa de dependencia, "su desarrollo posterior presenta lagunas que ocasionan que, en determinados casos, la fundación no pueda aplicar los procedimientos legalmente establecidos, al no adecuarse al perfil de las personas con enfermedad mental".