Como se ha informado desde el Instituto Armado en un comunicado, los cuatro detenidos forman parte de un grupo organizado, tienen edades comprendidas entre los 21 y 49 años, son nacidos en España, Marruecos y Ecuador, y domiciliados en Madrid.
Con la detención de estas personas a las que les consta un amplio historial delictivo, se dan por esclarecidos 13 delitos de robo con fuerza, perpetrados desde el 1 de marzo al 2 de mayo, entre los que figuran dos en la localidad riojana de Haro.
Además, los detenidos actuaron entre esas fechas en las localidades de Ansoain (Navarra), Algete (Madrid), Arenas de San Pedro (Ávila), As Pontes (A Coruña), Burela (Lugo), Cuéllar (Segovia), Foz (Lugo), Noia (A Coruña), Ribadeo (Lugo), Vilalba (Lugo) y Tarazona (Zaragoza).
En estos robos se llegaron a sustraer 4.817 euros en efectivo, 407 terminales telefónicos de alta gama, 4 Tablet, 4 Routers y 2 Moden, valorados en más de 131.000 euros.
La "Operación Carstar" se inició el pasado 7 de abril, como consecuencia de un robo con fuerza perpetrado en una tienda de telefonía móvil ubicada en Haro (La Rioja), en el que autor o autores desconocidos, tras forzar la verja y puerta de entrada al establecimiento, llegaron a sustraer 308 euros en efectivo y 63 teléfonos móviles de alta gama valorados en 20.700 euros.
Agentes del Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil en Haro (La Rioja) se hicieron cargo de las actuaciones, recogiendo en el lugar de los hechos diferente información que fue puesta en conocimiento de otras unidades de la Guardia Civil, al objeto de constatar actuaciones de similares características en todo el territorio nacional.
El análisis a las informaciones recibidas permiten constatar otros 12 robos con fuerza en establecimientos de telefonía móvil de las provincias de A Coruña, Ávila, Lugo, Madrid, Pamplona, Segovia y Zaragoza, durante el periodo comprendido entre el 1 de marzo y el 2 de mayo, en los que se sustrae dinero en efectivo, numerosos teléfonos móviles de última generación, Tablets y Routers, llegando a causar los autores de estos hechos cuantiosos daños materiales e importantes pérdidas económicas a sus propietarios.
MISMO MODUS OPERANDI.
Con el avance de las investigaciones se llega a constatar un mismo modus operandi en todos los robos, que se cometían siempre de madrugada, entre la 1,30 y las 5 horas.
Una vez que los delincuentes elegían su objetivo, se desplazaban al mismo en vehículos de alquiler, donde procedían a violentar los establecimientos mediante el uso de grandes mazas, palanquetas y extractores de bombines.
Seguidamente accedían al interior y, empleando el mínimo tiempo posible, se apoderaban del botín para emprender una veloz huída.
Las pruebas e indicios que se obtienen permiten la identificación de los autores de los robos, además de la localización de su base de operaciones en la localidad de Arroyomolinos (Madrid).
Una vez centrados y controlados los objetivos, agentes riojanos de desplazan hasta la citada localidad donde proceden su detención y puesta a disposición judicial.
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