El Índice de Precios de Consumo (IPC) bajó un 0,7% en julio respecto al mes anterior y elevó dos décimas su tasa interanual, hasta el -0,6%, debido el encarecimiento de los alimentos y bebidas no alcohólicas, según el indicador adelantado publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
De este modo, el IPC interanual suma tres meses consecutivos de aumentos después de haberse incrementado una décima en mayo y dos décimas en junio. Pese a ello, con el dato de julio, el IPC interanual encadena ya siete meses de tasas negativas después de arrancar el año en el -0,3%.
El último mes en el que los precios registraron una tasa más habitual para la economía española fue el de agosto de 2013, cuando el IPC se situó en el 1,5%. A partir de ahí, en parte por el 'efecto escalón' de la subida del IVA aplicada en 2012, el IPC dio un importante bajón.
Esta cifra significa que no se está cerca de lo recomendado, con el IPC a un 2%. Las medidas recetadas por Mario Draghi no parecen dar efecto, ya que, pasan los meses, y aunque el dinero está más barato que nunca, la gente no decide salir a gastar. Por lo que la inflación sigue estancada en cifras negativas.
Por su parte, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) incrementó tres décimas su tasa interanual en julio, hasta el -0,6%, y bajó un 1,3% respecto al mes de junio.
En términos mensuales, el IPC retrocedió un 0,7% en julio respecto al mes anterior, en contraste con los descensos del 0,9% registrados tanto en julio de 2015 como de 2014.
Los datos adelantados este viernes por el INE son orientativos. Las cifras definitivas de julio se conocerán el próximo 12 de agosto.
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