LUFE, 'el Ikea vasco' que triunfa en internet vendiendo camas a 30 euros

  • Una pequeña empresa guipuzcoana se convierte en un fenómeno viral y pasa de estar al borde del cierre hace tres años a recibir más de 200.000 visitas diarias en su página web.

    El secreto del éxito: venta on line, producto sencillo, barato y seguir el modelo do-it-yourself  (hazlo tú mismo) de la multinacional sueca.

    [Te interesa leer: Ikea y la 'milla de oro' madrileña]

LUFE, 'el Ikea vasco' que triunfa en internet vendiendo camas a 30 euros
LUFE, 'el Ikea vasco' que triunfa en internet vendiendo camas a 30 euros
I.E.

La materia prima no viene de los bosques de Laponia. Es madera de 'pino insignis' de pinares de Azpeitia (Gipuzkoa), en el corazón del valle del Urola. Eso sí, los muebles tienen cierto aire nórdico y son sencillos, estándar, baratos y de fácil montaje. Su proceso de fabricación es el básico: cortar, lijar y hacer los agujeros para encajar las piezas. No tienen apenas elaboración. Se pulen las esquinas, se agujerean y se lijan. Se venden al natural o en barniz de madera o blanco, "lo que pida el cliente". LUFE, 'el ikea vasco'. Camas a 30 euros por internet. Una sencilla cama de madera de pino de tan solo 29,99 euros y que puede montarse en cinco minutos. Su producto estrella. 

Pero también literas, cunas, camas nido, camas apilables, para hogares, guarderías, escuelas, casas rurales... "Hemos desarrollado un montón de proyectos... Alguno tenía que funcionar", cuenta Enrique Arrillaga, el responsable de la empresa, quien admite, de cualquier manera, que el apelativo de 'el Ikea vasco' con el que alguien le bautizó hace apenas unas semanas ha sido fundamental para el despegue de la empresa. "Tenemos que disfrutar del momento, estamos en una nube", continúa el empresario guipuzcoano.

Muebles LUFE, con sede está en Azpeitia (Gipuzkoa), ha apostado por la calidad y el diseño y ha conseguido dar el salto más allá de nuestras fronteras. Su secreto, ajustar los precios, ofreciendo la máxima calidad, eliminando intermediarios con la venta directa en internet. Han pasado de tener unas 2.000 visitas diarias a su página web, a alcanzar las 200.000. Y ahora su mercado ya no es solamente local, sino que venden en Francia, Inglaterra, Alemania, Marruecos, Bélgica, Holanda...

'Boom' mediático

Antes del 'boom' garantizaban la entrega en menos de una semana, pero ahora han ampliado el plazo hasta las 4 semanas. Incluso lo explican en su propia página web: "El boom mediático, que al principio tomamos como una bendición, pronto nos colocó en una situación delicada que nos obligó a replantearnos nuestros procesos e incluso a aumentar la plantilla de cara a satisfacer las necesidades de todos nuestros clientes, los de antes y los nuevos", explican en LUFE.

La cara del éxito puede obligar a cambiar para no ser arrasado por él. "Hemos tenido que dilatar algunos pedidos en contra de nuestra voluntad. Lo sentimos, ha sido causa de fuerza mayor. No nos arrepentimos de haber sido un boom. Seguimos pensando que ha sido una especie de bendición, teniendo en cuenta el pequeño tamaño de nuestra empresa. Pero sí lamentamos las molestias que estén pudiendo causar los problemas derivados de una situación tan extraordinaria", remarcan.

Y es que el fenómeno viral ha sorprendido a LUFE, una empresa que hace tres años estaba al borde del cierre y que hoy vive un éxito inesperado que le ha obligado a elevar su plantilla y aumentar los plazos de entrega porque, literalmente, no da abasto con los pedidos. Ha bastado que alguien la calificara como 'el Ikea vasco' para que miles de personas se hayan interesado por sus productos 'low cost', llamando a la vez la atención de los medios de comunicación, lo que ha generado en las últimas semanas una tremenda bola de nieve que ha convertido a LUFE en uno de los fabricantes más conocidos no solo de Gipuzkoa o Euskadi, sino de toda España.

La empresa, que solo vende por teléfono y a través de internet, lo ha notado en el negocio. "Hace unas semanas teníamos veinte pedidos al día y ahora tenemos 160", apunta un abrumado, pero feliz Enrique Arrillaga, que ya ha tenido que reforzar la plantilla porque con los nueve trabajadores que componían la empresa hasta el 'boom' no llegan a cubrir los pedidos.

Del concurso de acreedores al éxito

Un Arrillaga que se inició en el negocio de la madera hace 20 años junto a su padre. La empresa llegó a tener 47 empleados, pero la crisis del sector inducida por el estallido de la burbuja inmobiliaria le alcanzó de lleno y empezó a perder dinero. Llegaron las deudas, los ERE... y el concurso de acreedores. Pero este empresario de Eibar de 49 años se resistía al fracaso y apostó por adaptarse a los nuevos tiempos: venta on line y producto sencillo, barato y de fácil montaje por uno mismo en casa.

En los inicios de la nueva etapa, después de perderlo casi todo, un amigo le dejó un pequeño espacio en su empresa para que empezara a vender por 20 euros sencillas camas de madera de pino y aire nórdico que fabrica en una nave de 1.700 metros cuadrados de Azpeitia que de repente se les ha quedado pequeña. Porque ahora vende casi mil al mes.

Eso fue hace tres años. Y la cosa iba bien. El primer mes facturaron 4.000 euros, que se elevaron a 12.000 al cabo de medio año y a 20.000 al año siguiente. La previsión para este 2017 era llegar a 1,2 millones de euros, pero todo apunta a que la cifra se quedará corta.

Y la pregunta surge inmediata: Muebles baratos sí, ¿pero de calidad? "Todos nuestros muebles están fabricados con madera maciza de pino con certificación ecológica, obtenida en bosques sostenibles autóctonos. Son maderas ecológicas y resistentes", presume Arrillaga. 

Así es Muebles LUFE (un acrónimo que significa Local, Universal, Funcional y Ecológico), donde sigue primando la calidad de la madera, procedente de bosques vascos con certificación ecológica; donde los costes los abaratan al producir en serie y al seguir el modelo do-it-yourself  (hazlo tú mismo). En fin, 'el Ikea vasco'. 

Mostrar comentarios