Nueva York aprueba fuertes restricciones a Airbnb

Nueva York aprobó este viernes importantes restricciones para los usuarios del sitio Airbnb, con multas de hasta 7.500 dólares por el anuncio de alquileres de una mayoría de apartamentos por menos de un mes, informó el gobierno estatal.

Furioso, Airbnb anunció inmediatamente que apelará la nueva ley.

Leyes del estado de Nueva York ya prohíben desde 2010 el alquiler de la enorme mayoría de los apartamentos por menos de un mes cuando el propietario o el inquilino no está presente.

La enmienda firmada por el gobernador Andrew Cuomo implica sobre todo que los propietarios o inquilinos de la gran parte de los apartamentos de Nueva York que quieran subalquilarlas por menos de 30 días podrán ser identificados y castigados con multas de hasta 7.500 dólares por incumplirla.

"Estudiamos este tema de manera cuidadosa, deliberada, pero finalmente estas actividades ya están expresamente prohibidas por la ley", dijo Rich Azzopardi, portavoz del gobierno de Nueva York, en un comunicado.

"También comprometen esfuerzos para mantener y promover viviendas a preciso razonables al permitir que esas unidades sean utilizadas como hoteles sin regulación, y niegan a las comunidades ingresos significativos de impuestos no recolectados, el costo de los cuales es al final pagado por los contribuyentes locales", añadió.

El estado de Nueva York es uno de los mercados más jugosos para Airbnb, con más de 46.000 personas que proponen alquileres en línea.

La aprobación de la ley "recompensa a un interés especial -la industria hotelera de precios desorbitados- e ignora las voces de decenas de miles de neoyorquinos", denunció Josh Meltzer, jefe del departamento de política pública de Nueva York de Airbnb.

"La mayoría de los neoyorquinos ha recibido con brazos abiertos el compartir su casa, y continuaremos peleando por una solución inteligente que funcione para la gente, no para los poderosos. Estamos presentando una demanda en Nueva York esta tarde".

Airbnb asegura que tres cuartos de los neoyorquinos que alquilan sus casas en el sitio lo hacen para poder financiar sus propios alquileres, con precios por los cielos.

El alquiler de un cuarto o más de las viviendas por menos de 30 días en presencia de los dueños o inquilinos habituales no está penado por la ley.

El éxito de Airbnb ha generado una fuerte oposición de la industria hotelera, que denuncia una pérdida de ingresos.

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