Se trata de Last Mile Mobile Solutions (LMMS), una tarjeta dotada con un sistema que utiliza las aplicaciones móviles para gestionar mejor las respuestas a desastres, emergencias o crisis humanitarias.
Este sistema permite el registro digital de las poblaciones afectadas y después automatiza los servicios de suministro de ayuda, mejorando la eficacia y la eficiencia en la distribución y la gestión de los proyectos, y permitiendo a los trabajadores humanitarios alcanzar sus objetivos de una manera más rápida y eficiente.
Esta iniciativa surge porque las organizaciones, los gobiernos y las poblaciones a las que llegan las "oleadas" de refugiados y desplazados, "se ven desbordadas tratando de cubrir las necesidades más urgentes", según señala World Vision.
Actualmente, este sistema es utilizado por más de diez ONG internacionales, incluyendo agencias de la ONU, en más de 25 países. Sólo en el último año, LMMS ha registrado más de tres millones de beneficiarios.
Oxfam GB, Medair, Save the Children, Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), CARE, Mercy Corps, Consejo Noruego para los Refugiados (NRC), Food for the Hungry, UNICEF, Tearfund, Consejo Danés para los Refugiados (RDC) y PNUD son algunas de las entidades que han utilizado o están utilizando LMMS.
OTROS PROYECTOS DIGITALES
Pero la utilización de la tecnología digital para ampliar el impacto y la calidad del trabajo humanitario por parte de esta ONG se remonta a 2003 con proyectos desarrollados en otras áreas como gestión de desastres, asistencia alimentaria, educación, defensa, agua y saneamiento, agricultura y desarrollo económico.
Estos proyectos van desde la creación de espacios con Internet donde promover la protección infantil y la seguridad de los más pequeños en el uso de las nuevas tecnologías; el equipamiento de los trabajadores de salud con tecnología móvil para la provisión de agua potable; hasta la aplicación de nuevos sistemas en el registro de los desplazados para asegurar que reciben la asistencia adecuada.
Para ello, la ONG trabaja con "una amplia gama de socios", que incluyen compañías como Microsoft, Grundfos, Tangerine, Intel, MasterCard y Apple, además de con entidades gubernamentales, donantes y proveedores de tecnología, cuyas ayudas son "fundamentales".
TECNOLOGÍA CONTRA EL ÉBOLA
Uno de estos proyectos ha sido EBODAC, con la que se promovió la vacuna del ébola en Sierra Leona. Uno de los puntos más importantes del proyecto ha sido la creación de una plataforma de tecnología móvil dedicada a facilitar el despliegue de la vacuna contra esta enfermedad, su aceptación y el cumplimiento de los plazos.
Además de proporcionar a las comunidades locales información sobre el ébola y el sistema de vacunas, la plataforma envía recordatorios a las personas que la reciben para que vuelvan al centro a recibir las nuevas dosis "de refuerzo" y para facilitar el seguimiento de la cobertura de la vacunación.
En 2014, World Vision Tanzania, a través de Vision Fund --la entidad de microdonaciones de World Vision--, puso en marcha una plataforma de pago móvil en Tanzania con el que ha proporcionado servicios financieros a las comunidades más alejadas del país, sin necesidad de tener una cuenta bancaria y a un coste reducido, tanto para el cliente como para la organización. Para completar este proyecto, World Vision proporciona formación a los clientes en lectura, escritura y negocios.
En general, la iniciativa ha reducido los costes administrativos y la experiencia del cliente ha mejorado. "Gracias a este sistema pueden acceder a sus servicios bancarios desde cualquier lugar de Tanzania, en cualquier momento, sin tener que cerrar su negocio para ir a la ciudad, liberando un tiempo precioso que puede ser asignado a otras actividades económicas o familiares", expone la organización.
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