Pilar Soto, reelegida presidenta de la Asociación de Estaciones de Servicio de Aragón

Pilar Soto ha sido reelegida este jueves como presidenta de la Asociación de Estaciones de Servicio de Aragón (AESAR). Vuelve a ocupar este cargo en un momento en el que el sector está preocupado por la implementación del tramo autonómico del Impuesto Especial de Hidrocarburos en la región y por la proliferación de centros de repostaje que carecen de trabajadores.

Así lo ha indicado Soto, acompañada por el vicepresidente, Zolio Ríos. Respecto a la renovación de la Junta Directiva de AESAR, ha apuntado que los vocales para los próximos cuatro años serán Antonio Nuez, Javier Dalmau, Berta Balfagón, Juan Moisés Calvo, Leticia Gilabert, Livia Burzo y Manuel Beltrán. "Es un honor seguir al frente de esta nueva Junta Directiva, vamos a seguir trabajando duro", ha precisado.

La Asamblea de la Asociación, celebrada en las instalaciones de CEPYME Aragón, confederación en la que se integra AESAR, también ha servido para exponer las principales reivindicaciones del sector en este nuevo periodo. Soto ha puesto de manifiesto las dificultades que atraviesan, sobre todo derivadas de la aplicación del tramo autonómico del Impuesto Especial de Hidrocarburos en la Comunidad y de la implantación de estaciones de servicio sin personal.

Respecto al primer punto, el tributario, el hecho de que las Comunidades autónomas colindantes no apliquen este gravamen está provocando "una evidente fuga de litros y disminución de ventas" por el "efecto frontera", que causa "pérdida de puestos de trabajo en las gasolineras aragonesas" y en los negocios complementarios. Ha evidenciado que Navarra ha eliminado este tramo impositivo en el mes de enero. "Desde que tuvimos conocimiento de este impuesto, dijimos que iba a ser un grave perjuicio", ha sostenido.

Ha añadido que los consumidores, y en especial los que recorren largas distancias, como los transportistas, eligen para abastecerse gasolineras de zonas donde no se aplican estos recargos, situadas fuera de Aragón. Así, ha mencionado que el consumo de gasóleo en la Comunidad es un 5,3 por ciento inferior a la media nacional, con un descenso de 55 millones de litros en el último año, y hay estaciones de servicio de carretera que han registrado una bajada en las ventas de entre el 20 y el 30 por ciento.

ESTACIONES DESATENDIDAS

La presidenta de AESAR ha esgrimido que las estaciones de servicio sin personal, al no tener que hacer frente a este gasto, compiten con el resto en desigualdad de condiciones y ha evidenciado los efectos negativos que esto tiene en el empleo y los problemas relacionados con el cumplimiento de la legalidad vigente, la seguridad y el respeto de los derechos de los consumidores, sobre todo de aquellos que por sus especiales condiciones, como el presentar algún tipo de discapacidad, requieren atención en las operaciones de suministro de carburante y cobro.

Desde la asociación han recordado que en España se han cerrado más de 500 gasolineras en los últimos años. Según los representantes de los trabajadores, se han perdido ya más de 2.500 puestos y de seguir esta tendencia peligra el 80 por ciento del empleo en el sector. En Aragón, 50 estaciones de servicio han cerrado y más de 200 personas han perdido su puesto.

En opinión de Pilar Soto, es imposible garantizar, sin personal de ningún tipo, que los repostajes y descargas se realizan con las adecuadas garantías de seguridad, por ejemplo sin fumar, con el motor y luces apagadas, en recipientes homologados, en las cantidades máximas previstas y haciendo un buen uso del combustible.

Además, ha apuntado que si se produce un accidente --derrames, incendios, vertidos que puedan afectar al medioambiente-- no hay nadie formado para aplicar los procedimientos de emergencia y resolverlo.

La falta de personal no garantiza que las instalaciones funcionen bien, con las medidas correctas, emisión de facturas en el momento y acceso a la inspección por parte de la autoridad competente. Tampoco asegura que quien precisa de asistencia pueda obtenerla o que los dispositivos complementarios --agua y aire-- se encuentren en buen estado de funcionamiento, como es obligatorio.

APOYAR Y ESCUCHAR A LOS EMPRESARIOS

Soto ha manifestado que la Administración "debería apoyar y escuchar más a los empresarios de estaciones de servicio aragonesas, que, aunque quieren mantener los puestos de trabajo para ofrecer un mejor servicio al consumidor y garantizar la máxima seguridad en sus instalaciones, con la situación actual ya se están viendo obligados a cerrar turnos y reducir plantillas; de seguir esta preocupante tendencia, será imposible evitar los ERE", ha advertido.

La Asociación de Estaciones de Servicio de Aragón integra a 99 gasolineras de 70 empresas, distribuidas por las provincias de Zaragoza, Huesca y Teruel, que operan en un sector que, además de emplear a más de 1.500 personas en la Comunidad, tiene una gran importancia para el equilibrio territorial y la prestación de numerosos servicios básicos en el medio rural con gran amplitud de horarios. Forma parte de la Confederación Española de Empresarios.