La entidad, que califica este 11 de marzo como "un día histórico para las aves marinas en Europa", recuerda que unas 200.000 aves marinas mueren accidentalmente en artes de pesca cada año en aguas comunitarias, entre las que se incluyen especies al borde de la extinción, como la pardela balear, cuya principal amenaza es precisamente la captura accidental en artes de pesca.
"La muerte evitable de aves marinas por la captura accidental es una lacra que arrastramos desde hace años", ha afirmado el jefe de Políticas en BirdLife Europea, Ariel Brunner, quien sostiene que "el problema ha sido casi resuelto en muchas pesquerías de todo el mundo, pero ha pasado desapercibido durante años en Europa".
Por su parte, la directora ejecutiva de SEO/BirdLife, Asunción Ruiz, ha manifestado que con esta normativa "los pescadores rentabilizarán su actividad pescando sólo peces y el grupo de aves más amenazadas de Europa se mantendrá a flote". "Hoy las aves marinas están de enhorabuena", ha celebrado.
En particular, los socios de BirdLife celebran las medidas propuestas para la pesca con palangre. Según indican, la organización ya ha demostrado a escala mundial, gracias al trabajo del llamado Albatros Task Force (ATF, o Grupo de Trabajo de Albatros), que estas soluciones (uso de 'líneas espantapájaros', calado nocturno, y añadir peso a los anzuelos) contribuyen a minimizar sustancialmente las capturas de aves.
Igualmente, SEO/BirdLife y sus socios esperan que la legislación salga adelante, ya que todavía tiene que ser negociada entre el Consejo y el Parlamento Europeo, y que ambas instituciones tengan presentes los objetivos de la Política Pesquera Común en materia de conservación de los ecosistemas marinos.
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