El producto neto bancario del tercer banco más grande de Francia por volumen de activos, durante los meses de enero a junio, fue de 11.673 millones de euros, un 11,3% menos que en el primer semestre de 2016, mientras que los gastos de explotación alcanzaron los 8.813 millones de euros, un 4,9% más.
El beneficio neto atribuible en el segundo trimestre del año alcanzó los 1.058 millones de euros, lo que supone una caída del 27,6%. Al mismo tiempo, los ingresos netos de la entidad entre los meses de abril a junio se situaron en 5.199 millones de euros, un 25,6% inferior al mismo periodo del año anterior.
El consejero delegado de la entidad francesa, Frédéric Oudéa, señaló que ante la situación económica y financiera en el mundo, los resultados de Société Générale "son muy sólidos", y subraya la relevancia de su modelo bancario "diversificado e integrado".
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