Unespa aboga por la colaboración de la educación financiera y el ámbito jurídico para mejorar la transparencia

Durante su intervención en las jornadas 'Solvencia II. El nuevo marco regulatorio del mercado de seguros', González de Frutos ha resaltado que en materia de transparencia "hay todavía demasiados actores que consideran que lo que hay que hacer para que el consumidor esté bien informado es abrumar a los operadores con obligaciones de información".

En este sentido, ha puesto de manifiesto que en los últimos años se ha creado "una maraña de normas diversas", entre las que ha destacado la Lossear y el Rossear, las diferentes generaciones de la MiFid, la directiva de distribución o la futura reforma de la directiva de fondos de pensiones de empleo, entre otras. "(Todas ellas) generan obligaciones en materia de transparencia que en ocasiones se solapan unas sobre otras", ha añadido.

Por esta razón, Unespa ha introducido en el diseño de estas obligaciones la necesidad de que realizar test de idoneidad antes de aprobar la norma con el fin de asegurarse de que la información objeto de regulación "es verdaderamente necesaria y es comprendida por sus receptores".

SOLVENCIA II

A lo largo de su discurso, González de Frutos ha hecho alusión a la nueva normativa Solvencia II, "que viene a suponer la vinculación íntima entre los entornos jurídico y técnico de la actividad aseguradora".

Tras destacar que la nueva norma obligará a los aseguradores a realizar una gestión del negocio basada en riesgos, ha apuntado que Solvencia II da una libertad "muy amplia" a las aseguradoras de invertir como quieran.

Sin embargo, "prescribe un sistema de cargas de capital que, en la práctica, penaliza con cargas elevadas las concentraciones en exceso, las exposiciones a activos de alto riesgo o la apuesta de inversiones de baja calidad en búsqueda de elevadas rentabilidades teóricas.

La presidenta de Unespa ha indicado que en el tiempo en el que las aseguradoras han trabajado para adaptarse a Solvencia II han defendido dos prioridades: garantizar una transposición de la normativa "eficiente y armónica" para evitar diferencias respecto a otros mercados y garantizar en las normas la "necesaria flexibilidad y el necesario realismo" para no convertirlas en normas difíciles de aplicar.